«El sentido común y la claridad es lo que menos se usa en la Justicia», dice el juez Taín

TANIA TABOADA LUGO / LA VOZ

LUGO

Carlos Castro

El magistrado clausuró en Lugo unas jornadas que organizó el sindicato ANPE, centrando su ponencia en el acoso escolar

27 oct 2019 . Actualizado a las 13:52 h.

Organizar cualquier tipo de jornadas y poder contar con su presencia es garantía de éxito. El magistrado José Antonio Vázquez Taín (A Merca, Ourense, 1968) volvió a demostrar su profesionalidad como juez y sus dotes de gran comunicador. Cercano al público, con un punto monologuista, huyendo del formato conferencia para desarrollar un debate en el que todos los asistentes pudiesen participar, Vázquez Taín conquistó a un gran número de docentes que ayer se encontraban en el salón de actos del edificio de la Xunta en Lugo.

El juez se desplazó a la ciudad de la Muralla para participar en la clausura de las jornadas de la enseñanza que organizó el sindicato ANPE (Asociación Nacional de Profesorado Estatal). Vázquez Taín se encargó de abordar la conflictividad y los problemas de convivencia en la enseñanza desde la perspectiva jurídica, centrando su ponencia en el acoso escolar y lo relacionado con las nuevas tecnologías.

El magistrado expuso una visión general de las problemáticas iniciadas por un conflicto en los centros educativos, que acaban en los juzgados y que una vez en estos, en vez de solucionarse el problema, empeora. «A veces parece que en la Justicia defendemos más a los delincuentes que a los profesionales. Generalmente, cada vez que un profesional viene al Juzgado, entra con pánico y percibimos que se siente maltratado. El problema se reproduce y se acaba con la convicción de que al culpable de los hechos no le hicieron nada. ¿Por qué esa situación?», se preguntaba Taín.

Sin pelos en la lengua, el magistrado respondía a su propia pregunta. «Desgraciadamente en España, el concepto de Justicia es más doctrinal que real, puesto que nos concebimos más como poder que como servicio. Como servicio somos una burocracia y prueba de ello es que no estamos ni informatizados», indicó.

Educación y Justicia

En cuanto a la sintonía entre Justicia y comunidad educativa, el magistrado percibe una absoluta desconexión. «Los sindicatos del profesorado tendrían que conseguir una comisión mixta entre Justicia y educación para retroalimentarse; es decir, nosotros revisar los protocolos que se utilizan y vosotros transmitir los problemas que tuvieran en centros educativos», consideró.

En lo referente a los problemas en los colegios, Taín considera que los actuales no tienen que ver con los de antes pero no en cuanto a la existencia de problemas diferentes. «Los problemas son los mismos que antes, lo único que pasa es que la tecnología permite cometer los mismos 'pecados' pero de otra forma. Antes te acosaba el más fuerte del colegio, ahora puede hacerlo un debilucho desde un ordenador; pero el problema sigue siendo acoso», expuso.

En el transcurso de la charla, el juez insistió en que los docentes son los profesionales y necesitan sentirse como tal, y no solo en la educación del alumno, que es el 30% del colegio. «En el centro no solo se educa, sino que se cuida, vigila, entretiene y se transmiten valores. Los profesores tienen que tener un mínimo de seguridad en que todo eso es legal y cada vez que exista un incidente lo primero que tienen que hacer es explicar lo qué se ha hecho y qué es lo más difícil de todo el proceso», indicó el magistrado, que aseguró que cada vez que un profesional intenta explicar lo qué hace, dependiendo de su personalidad, lo explica de una manera muy concreta.

Ante un hecho, Taín expuso la importancia que tiene por parte de los profesores explicar al detalle los hechos. «El juez desconoce el funcionamiento de un centro y un docente será el mejor perito. El 80% del juicio es prueba y esta es de hechos. Si los profesores los fijan es muy difícil que la justicia falle porque aplicar el derecho es muy sencillo», asegura Taín, que añade que muchas veces el mundo se complica porque nosotros lo permitimos. «El sentido común, la simplicidad y claridad es lo que menos se usa en ámbitos como la Justicia», considera.

En casos de acoso escolar, el magistrado parte de la base de que es en esas situaciones en dónde no es tan importante el hecho como la combinación de hecho y resultado. «Cuando hay un problema es o no es. Los chavales no interactúan igual ante los mismos instintos. En el tema del bullying se debe comprobar la realidad del hecho, en qué circunstancias y respecto a quién se comete», sentenció.

En cuanto a incidentes en centros, el magistrado indicó que en varias ocasiones se tiende a mirar para otro lado. «Hay que explicar todo con datos y cifras y grabar es lo más seguro porque nunca se recuerdan las cosas igual. A veces no coinciden las declaraciones y se tiende a pensar que se miente y no es cierto; simplemente se cuentan desde una perspectiva diferente», aclaró el magistrado, que subrayó que jurídicamente se puede grabar y utilizar cualquier grabación.