La Diputación construirá las residencias comprometidas

LUGO

Carlos Castro

El gobierno de Tomé responde en el pleno que pidió el PP que nunca se pusieron en duda los compromisos ya adquiridos y piden a los populares que «se sumen ao carro»

20 ago 2019 . Actualizado a las 13:06 h.

El pleno extraordinario que solicitó el PP en la Diputación para pedir que el gobierno provincial aclarase el futuro de las residencias sirvió no solo para dejar clara la posición del equipo que preside José Tomé, sino también para que el presidente le marcase a la líder de la oposición, Elena Candia, cuáles serán las formas y las manera del nuevo mandato.

La presidenta del PP de Lugo calificó de alarmista las palabras de Tomé, que recogieron los medios de comuniación, sobre que la Diputación no iba a hacer más residencias y que las competencias les corresponde a la Xunta. Candia dijo que era una forma de empezar el mandato «onde só se lle coñece o que non vai a facer».

Carlos Castro

Tanto la portavoz del PSOE, Pilar García Porto, como del BNG, Efrén Castro, dejaron claro que la Diputación construirá todas las residencias comprometidas por el anterior mandato, incluidas aquellas que solo tenía un protocolo firmado, como era el caso de Pantón. Ambos recordaron que las competencias son de la Xunta. El presidente provincial cerró el pleno y fue muy contudente tanto con el contenido del pleno como con la popular Elena Candia.

Tomé recordó que el nunca dijo que no se iban a construir las residencias y aclaró rotundamente que se harán todas las comprometidas, que son 18: Pol, Trabada, Ribadeo (las tres ya abiertas), A Fonsagrada, Pedrafita, Becerreá, Navia, Ourol, Pantón, Portomarín, Folgoso do Courel, Ribas de Sil, A Pontenova, A Pobra do Brollón, Meira, Guitiriz, Cervantes y Castroverde. El presidente dijo que se adquieren estos compromisos pero ninguno más, porque debería ser la Xunta quien se haga cargo de esta materia, «tal e como marca o artigo 27 do Estatuto de Galicia».

Carlos Castro

Pero Tomé aprovechó el pleno para dejarle claro a la oposición las nuevas normas y formas de su presidencia. La primera fue un cronómetro para marcar los tiempos de cada grupo. Y la última fue cuando le retiró la palabra a la popular Candia cuando esta la tomó «sen pedir permiso, antes deixaríanlle pero agora non».

El presidente socialista fue muy crítico con la líder del PP de Lugo a la que acusó de «gustarlle xogar no terreo embarrado» y le recordó: «Esto camibou, xa non é a actriz principal, aquí hai xente que quere traballar».