«Las barreras mentales son las peores y las tenemos todos»

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO

Ángeles Miguélez, trabajadoraa invidente en el Museo do Mar, presenta una comunicación en el congreso mundial sobre arte e inclusión social en los museos

04 abr 2019 . Actualizado a las 08:53 h.

Ángeles Miguélez se ha convertido en una bandera, en un ejemplo a seguir para cientos de lucenses que viven con alguna discapacidad y que en vez de relegarse a un papel secundario pueden ofrecer a cambio sus conocimientos y habilidades a la comunidad. Ella, invidente, desde hace ocho años se encarga, junto a su compañera vigilante Amelia, del Museo do Mar de San Cibrao, donde además imparte talleres para niños y adultos dentro de la programación de museo social e inclusivo de la Rede Museística Provincial.

Miguélez participó ayer en el congreso internacional El Museo para todas las personas que promueven las universidades Complutense, UNED y Autónoma de Madrid, donde presentó el proyecto educativo que desarrolla Cogami en los colegios de la provincia a través de la red de la Diputación de Lugo y bajo la coordinación de Cristina Alonso (Cogami) y Encarna Lago (gerente de los museos provinciales).

«Presenté el trabajo en red que defiende la inclusión, que es un concepto que va más allá de al accesibilidad, y en el que son las personas con discapacidad de Cogami las que se encargan de ser los formadores, sería como la educación a la inversa», explica Miguélez.

El programa de Cogami comenzó el pasado curso en el colegio de As Gándaras, para luego extenderse a otros centros e institutos. Los usuarios de la asociación, tras haber recibido formación, se encargan a su vez de formar a los chavales en diversas nociones sobre el arte y los museos. «Todo estos supone un beneficio infinitivo, de ida y vuelta. Cuando tienes algún tipo de incapacidad y ves que tu trabajo tiene un fin, que se reconoce, tu autoestima y tu moral sube, ves que eres útil para la sociedad», reflexiona Miguélez. A su vez, señala, los alumnos de los colegios «se acostumbran a la diversidad, como un proceso natural, en el que cada uno puede aportar lo que puede».

Esta mujer invidente, nacida en el barrio lucense de Galegos, señala que iniciativas como esta de Cogami suponen un paso más en la filosofía social e inclusiva de la Rede Museística Provincial: «Se trata de llevar los museos al exterior, pero con proyectos de continuidad, no ideas aisladas y para quedar bien, sino generando un efecto de bola que se va agrandando y que incluye cada vez a más personas y donde estas generan una comunidad que tiene mucho que decir en la gestión de un museo».

Miguélez reconoce que su figura se ha convertido en un ejemplo para otras personas con discapacidad. En los últimos años ha participado en varios seminarios y congresos, además de ser formadora de trabajadores de otros museos, como los de Asturias o Baleares. También fue, con el impulso de Encarna Lago, la que expuso por toda España el modelo de Fotografías a Ciegas. «A veces supone una responsabilidad que te vean como una bandera, hay algo de pánico escénico, pero estoy encantada, porque además entiendo que hago un trabajo válido, que junto con mi compañera Amelia sacamos adelante un museo que visitan más de 30.000 personas al año». Ángeles Miguélez, que dice que le gusta «llevar la bandera de la normalización» recuerda que «las barreras mentales son las peores, pero ojo, las tenemos todos».

El congreso, que termina mañana, tiene entre sus ponentes invitados a Encarna Lago, que hablará hoy sobre los museos públicos en el siglo XXI: accesibilidad, educación e integración.

«Cuando tienes una incapacidad y ves que tu trabajo se reconoce, crece la autoestima»

«Queremos llevar los museos al exterior, con proyectos de continuidad, no con acciones aisladas»