Vía «verde» de asfalto y chapas de acero para proteger de un tren que no pasa

LUGO

ALBERTO LÓPEZ

A Pobra de San Xiao cierra la antigua vía y una gran muro de traviesas de hormigón separa el centro de la villa

01 abr 2019 . Actualizado a las 21:11 h.

Asfalto y chapas de acero en lo que debería ser la primera gran vía verde de la provincia de Lugo. Esos son los materiales utilizados en A Pobra de San Xiao para zanjar, por ahora, la posibilidad de sacar adelante un atractivo proyecto que beneficiaría a tres municipios. De momento, el recuerdo del paso del tren por esta localidad lucense ya es una estampa de feísmo constituida por una «muralla» de hormigón formada por miles de traviesas de cemento que fueron colocadas a modo de artificial frontera que parte en dos lo que es el centro de la villa.

La reclamación de cientos de vecinos de la comarca, que quieren que los concellos se impliquen con ADIF para convertir casi nueve kilómetros de vía en un gran paseo verde, cayó en saco roto. Los que plantean el itinerario alternativo se encontraron con la llegada del asfalto y las biondas metálicas. «É curioso, póñenas como si fose vir o tren cando xa levantaron as vías. Pensan, se cadra, que algún coche vai entrar por encima dos coios? Van listos», aseguró un vecino de Pobra de San Xiao.

Las vallas de acero galvanizado fueron colocadas en los dos pasos principales de A Pobra de San Xiao. Dicen los vecinos que son una buena señal de que no habrá vía verde, ni nada que se le parezca. Consideran que sí era necesario reparar la calzada en la zona del paso de la vía, sobre todo después de haber sido levantados y los carriles y las traviesas de hormigón pero, dicen, que la obra pudo hacerse respetando ya la idea de la senda turística; es decir, usando otro tipo de materiales que no fueran ni el asfalto ni mucho menos las vallas metálicas que pudieron ser de madera.

En el centro de la localidad también habilitaron con asfalto un pequeño paso peatonal, justo al lado en el que se recuerda a un joven que murió arrollado por un tren y una pancarta reivindicando la vía verde, que sobrevive de una concentración realizada hace ya casi un año.

Cinco ríos

El tramo tiene un interés especial porque la vía del tren cruzaba nada menos que cinco ríos, alguno de ellos tres veces, en el trayecto a través de los puentes que son del primer trazado, es decir superan ampliamente los cien años. La vía verde que debería habilitarse pasaría sobre el río Neira, el Maceda, el Tórdea y después Pobra de San Xiao, el Sarria en tres puntos diferentes.

El trayecto discurre, especialmente en su parte final, entre bosques de carballos y en algunos tramos casi por encima el río Sarria. Posiblemente la población pierda la posibilidad de disfrutar del entorno si este no se prepara para el paseo. Actualmente, con el balasto que hay acumulado en la vía, es difícil poder moverse a pie y mucho menos en bicicleta. Precisamente algunos colectivos de ciclistas consideran que el recorrido es ideal para hacer una ciclo vía como las que fueron habilitadas en la parte norte de Portugal en tramos por los que el tren ya no circula.

Los alcaldes de Láncara, O Corgo y O Páramo, hablaron del proyecto con ADIF. Quedaron en que primero había de desafectar la estación de A Pobra y a partir de ese momento desarrollar el proyecto de senda verde que incluiría jardines en San Xiao.