Las cifras de usuarios de las estaciones Zamora o Palencia muestran las carencias lucenses
25 mar 2019 . Actualizado a las 21:17 h.El aumento de las frecuencias entre Lugo y Madrid, a través de los Alvia de Galicia con la Meseta, en la primavera del 2016 fue una pequeña esperanza para la abandonada estación lucense. El propio Gobierno, en una respuesta a los diputados populares García Díez y De Olano, lo confirma: «Los nuevos servicios y enlaces, además del descenso del desempleo, el repunte de la actividad económica y el turismo han producido el incremento de la demanda».
Pero el propio Gobierno reconoce que las cifras de viajeros se han estancado y que «existe potencial de crecimiento de la demanda». Así, el número de viajeros por tren de los trayectos entre las capitales lucense y madrileña varía entre los 17 y 33 viajeros, frente a las plazas ofertas, que son 124, lo que representa una ocupación entre el 14 % y el 27 %. Con estas cifras, y reconociendo que existe potencial para crecer, Renfe señala que la oferta actual de servicios entre Lugo y Madrid «satisface la demanda existente».
Pero si se analizan los datos de los viajeros subidos y bajados entre Madrid y Lugo, el número apenas se ha incrementado entre el 2017 y el 2018. La media del primer año se sitúa en los 11,1 viajeros y el pasado fue de 11,5. Estas cifras están muy lejanas de otros servicios de Madrid con ciudades gallegas que sí disfrutan de más conexiones y trenes más rápidos: Ourense (275,3 viajeros), Santiago (166,2), A Coruña (82,8), Vigo (80,4) y Pontevedra (34,3).
El leve incremento de la cifra de viajeros entre Madrid y Lugo se ha reflejado también en las tímida subida de viajeros general de la estación de Lugo, que en un año solo ha subido 3.000 clientes, con unas cifras (como se puede ver en la tabla adjunta) muy por debajo de otras ciudades gallegas y de nuestro entorno
La dura comparativa de Lugo
Echando un vistazo a las cifras de viajeros en las estaciones más cercanas a Lugo se puede comprobar la situación en la que está la capital lucense y la que disfrutan ciudades mucho menores en población y peso económico. Así, Zamora y Palencia, que cuentan con líneas de alta velocidad o con trenes que se aprovechan de la vía rápida, cuentan con un número de viajeros que dejan a la estación de Lugo en un simple apeadero.
Zamora capital, con casi 40.000 habitantes menos que Lugo, y su provincia con la mitad de población que la lucense, tiene cifras de usuarios del tren que demuestran que si una ciudad disfruta de inversiones ferroviarias, puede tener acceso al desarrollo económico y social. Palencia ciudad tiene 20.000 habitantes menos y su provincia la mitad de la lucense, y su estación ferroviaria casi alcanza los 600.000 viajeros. Lugo solo llega a los 78.616.