Fomento aclara cuáles son los criterios para la iluminación de autovías

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

LUGO

ALBERTO LÓPEZ

Explica que la rotonda de la A-8 con la AG-64, en Vilalba, no necesita luz

05 mar 2019 . Actualizado a las 20:47 h.

El Ministerio de Fomento acaba de aclarar de nuevo cuáles son los criterios para que se ilumine o no un tramo de autovía. Lo hizo en base a la pregunta que formuló el diputado de En Marea por Lugo, Miguel Anxo Fernán Vello, acerca de los problemas de seguridad vial en la conocida como rotonda de Grandisca, en Vilalba, donde confluyen la A-8 y la autovía Ferrol-Vilalba, AG-64.

El diputado nacionalista señalaba en su exposición de motivos la falta de iluminación en un cruce en el que confluyen otras vías y que causa problemas para la incorporación «por carecer de adecuada iluminación». El diputado señalaba que la rotonda de Grandisca debería tener el mismo tratamiento que el puente de los Santos o del entronque de la A-8 con la A-6 en Baamonde, donde sí hay iluminación. Fernán Vello también señalaba en la pregunta los problemas de visibilidad en los 90 kilómetros de la A-8 a su paso por la provincia de Lugo y preguntaba qué medidas se iban a adoptar.

Fomento responde que en el cruce vilalbés se aplica la normativa vigente, que señala que en autovías donde se producen más de 120 días de lluvia al año, como es este caso o todo el entorno de Lugo capital, el criterio para iluminar, con carácter general, los enlaces en las autovías es que la intensidad media de circulación de vehículos sea superior a 60.000 al día, algo que no sucede en este caso. «Además, para justificar la iluminación del tronco de las autovías, se exige la condición de que discurra por suelo urbano en ambas márgenes», aclara Fomento.

No es tramo de accidentes

Para el Gobierno, ninguna de las dos circunstancias citadas se verifica en el caso de la A-8, «dado que su intensidad de tráfico es, aproximadamente, entre un 10 % y un 15 % del valor exigido para justificar su iluminación y, además, discurre casi íntegramente por suelo rústico».

Además, el Ministerio de Fomento señala que ningún tramo de la A-8, ni siquiera el enlace con la AG-64, está identificado como Tramo de Concentración de Accidentes, según la metodologías aprobada por la DGT, por lo que no es obligatorio el uso de iluminación.

 Nadela y A Campiña

La situación que describe Fomento, en base a una orden circular 36/2015, tiene la misma aplicación para entronques de la A-6 a su paso por Lugo, como sucede en Nadela o a Campiña, donde muchos conductores echan de menos la iluminación nocturna. En ambos casos, aunque circulan a diario más de 20.000 vehículos, no llegan a los 60.000 que marca la norma. Y, además, el suelo no está delimitado como urbano. Por este motivo, llama la atención que mientras toda la avenida de A Campiña está iluminada, justo cuando se llega a la rotonda con la A-6 y la N-640 deja de esta iluminada la vía al pasar a ser suelo rústico.

Fomento tomó la decisión en el 2015 de aplicar estas normas tras «la modificación tarifaria y el incremento del coste de la energía que obligó a replantearse la explotación de las instalaciones».

Deben circular al día más de 60.000 vehículos y en los enlaces el suelo debe ser urbano

El Gobierno dice que los viaductos en As Nogais tienen daños en los estribos pero no afectan al tráfico

El Ministerio de Fomento realizará en breve las inspecciones necesarias para determinar el grado de deterioro de los viaductos de la A-6 en Silvela y Noceda, entre As Nogais y Pedrafita. «En las inspecciones principales se han detectado deterioros significativos que, dadas sus características, requieren de una inspección especial para determinar su alcance y afección a la seguridad futura de la estructura», señala Fomento en una respuesta al diputado Fernán Vello.

En cualquier caso, el Gobierno señala que los deterioros detectados no implican la necesidad de medidas para limitar el tráfico actual. Los deterioros son debidos a un asentamiento en los estribos. «El alcance de los mismos y su evolución futura se están determinando en estos momentos mediante los estudios técnicos correspondientes. Actualmente no existe ningún problema de seguridad que limite el uso de estas estructuras».

Indican que las obras comenzarán una vez se finalicen los estudios que se están realizando y se determine el alcance de las mismas. «Todas las estructuras se revisan con inspecciones básicas cada 15 meses y principales en un plazo de cinco años». Destaca Fomento que «se va a invertir en el mantenimiento de los puentes a través de los contratos de conservación integral y de los programas de mantenimiento extraordinario, en función de las disponibilidades presupuestarias y a través de actuaciones de emergencia en el caso de que se detecte un problema grave que requiera una solución urgente».