La corporación rechazó también retomar la ordenanza mordaza pero aprobó crear piscinas termales en el Miño
25 oct 2018 . Actualizado a las 22:54 h.Los monumentos de Lugo seguirán sin nigún tipo de vigilancia y padeciendo ataques, como los que afectaron a la Fonte de San Vicente, en la Praza do Campo, porque el pleno no aceptó una propuesta del PP para la instalación de cámaras de vigilancia. Votaron en contra los socialistas, el BNG, Izquierda Unida y Lugonovo. Ciudadanos votó en contra alegando que no le había sido incluida una enmienda. Los populares aseguran que si aceptaron la única que presentó; otra dicen que la llevaba Olga Louzao escrita en un papel, pero no llegó a presentarla por lo que la alcaldesa le impidió que se debatiese.
Otra propuesta popular que fue tumbada fue la de retomar la polémica ordenanza mordaza que los socialistas decidieron retirar ante la polémica suscitada en la ciudad, de hecho varias personas exhibieron carteles de protesta en el salón de plenos. Todos los grupos de izquierda votaron en contra de que vuelva a elaborarse la ordenanza
El pleno aprobó la propuesta del Bloque para crear piscinas térmicas públicas en el Miño, en una zona próxima al balneario. Los nacionalistas dijeron que este servicio podría convertir a la ciudad en un referente del uso de las aguas termales a largo plazo. Otra propuesta nacionalista aprobada fue la de crear una oficina de asesoramiento energético.