El técnico cree que los fallos en ataque condicionaron la defensa de los suyos
21 oct 2018 . Actualizado a las 14:19 h.«Ha sido un partido dominado por Burgos desde el principio. Nosotros hemos estado faltos de intensidad, con miedo a hacer las cosas. Hemos estado siempre un paso por detrás de ellos. Hemos fallado tiros abierto y nos hemos venido un poco abajo», valoraba Natxo Lezkano tras el duelo disputado en Burgos. El técnico del Cafés Candelas Breogán apuntaba que «no podemos permitir que nuestro ataque condicione nuestra defensa. Hemos intentado volver al partido utilizando todas las situaciones que podíamos a nivel táctico, hemos conseguido ponernos a diez, pero nos ha faltado creer que podíamos ganar aquí».
Explicaba del rival que «jugando aquí en casa sabíamos que iban a empezar fuertes, agresivos, tenían necesidad de ganar. Han jugado más sueltos y con más confianza por el apoyo del público y ya he dicho que es un partido que han merecido ganar sin ninguna duda» y añadía que «es un gustazo jugar aquí», en referencia al ambiente del Coliseum con más de 9.000 aficionados y lamentaba: «Es una pena que no hayamos visto un partido más abierto».
Alec Brown «sentía que podía jugar, hemos aprovechado la inercia del calentamiento para que entrara, pero no se ha notado cómodo y no hemos querido forzarle», comentaba el técnico vasco sobre el interior americano.
Epi, contento
«Creo que hemos entrado bien, ha habido momentos en los que hemos entrado cómodos. Errores puntuales nos han impedido llevar una renta mayor en algunos momentos del partido. Tenemos todavía mucho margen de mejora, sobre todo no tener despistes que nos pueden dar un susto», valoraba Diego Epifanio. El técnico de Burgos decía alegrarse «porque algunos jugadores han visto el aro un poco más grande» y explicaba que su equipo «ha tenido más momentos bien que mal, el trabajo del día a día que hacen los jugadores va ayudando. Lo mejor siempre es la victoria. Pensando en el futuro, 16 puntos de ventaja que siempre nos vendrán bien».