La erosión del incendio forestal del pasado mes de octubre en Negueira de Muñiz y la ausencia de medidas para frenarla, causantes de la situación
09 sep 2018 . Actualizado a las 12:41 h.Los veinte vecinos de la aldea de San Pedro de Ernes, en Negueira de Muñiz, no lo tienen fácil desde ayer para circular con sus coches por la zona ni con sus tractores para desplazarse a las fincas. Una tromba de agua hizo surcos y destrozó carreteras y caminos y sembró el pueblo de barro y piedras. Según los vecinos, no es la primera vez que ocurre.
Hace dos meses otra tormenta similar a la de ayer arrastró tierra y piedras del monte calcinado por un incendio forestal en el mes de octubre del pasado año. Las llamas llegaron cerca de las casas y son las causantes de la erosión que ahora genera estos problemas.
Una de las vecinas de la aldea temía que el agua volviera a entrar en su casa, como hace dos meses, traspasando la barrera de gravilla que depositó el ayuntamiento para prevenir este tipo de situaciones. «O Concello fixo un parche e e non amañou o que tiña que amañar. Nós temos medo de que o muro da casa non responda e quedemos todos baixo os escombros», explicó. Según esta mujer, delante de la escuela se formó una escombrera.
Los vecinos, que protestan porque no se hayan tomado medidas para frenar la erosión ?aseguran que solamente tiraron unas pacas de paja en el monte? reclaman soluciones urgentes.
Los habitantes de Ernes, familias procedentes de distintos puntos de España y del extranjero, que viven en las casas de la antigua comuna, se quejan de que el alcalde y el equipo de gobierno no atiende las demandas que plantean desde hace tiempo.