La ORA pierde defensores en Lugo tres años después de suprimida

Enrique Gómez Souto
enrique g. souto LUGO / LA VOZ

LUGO

ALBERTO LÓPEZ

La suspensión del servicio se llevó a cabo con carácter temporal

28 jul 2018 . Actualizado a las 21:30 h.

El 30 de julio de 2015 fue el primer día sin aparcamientos ORA en Lugo desde su implantación en agosto de 1985. Desde entonces, no se llevó a cabo la anunciada reimplantación de este sistema de ordenación de estacionamiento. Hubo un tiempo en el que la opinión mayoritaria, al menos la expresada por los distintos operadores sociales, políticos y económicos, se inclinaba por la puesta en servicio de un sistema similar, si bien, para el común de los ciudadanos, librarse de pagar por aparcar en la calle constituyó un alivio. A estas alturas, hay opiniones abiertamente contrarias a la reinstauración de la ORA, salvo en emplazamientos muy concretos, y otras que claramente han evolucionado en ese sentido, si bien todavía son rehenes de opiniones expresadas anteriormente. Los que siguen son las respuestas dadas por responsables de asociaciones vecinales y profesionales, a título particular, porque no pudieron consultarlas con las direcciones de las que forman parte.

La opinión más contundente sobre este asunto es la del presidente de Lugo Monumental, Luis Latorre: «Lugo no necesita ORA». Indica que sí es conveniente la regulación de estacionamientos en entornos muy concretos, relacionados con servicios administrativos. Señala así las inmediaciones de la delegación territorial de la Xunta, del INSS, etcétera. «El problema en Lugo no es de aparcamiento, en sentido estricto: es de movilidad. Con un transporte público eficaz (adaptado a las necesidades en líneas, frecuencias, etcétera), no necesitamos ORA». Puntualiza que el tipo de control de aparcamientos en entornos concretos debe de ser también de duración limitada a los horarios de la Administración. De lo que se trata es que el administrado pueda dejar el coche durante unos minutos para efectuar trámites.

El presidente de la Federación Provincial de Asociacións, Jesús Vázquez, señala: «A xente non botaría de menos a ORA se dunha vez se acondicionan os anunciados aparcadoiros disuasorios, se, como propuxo o BNG, se abren ao público polas tardes os da Xunta e os da Deputación, e se, como levamos pedido tantas veces, se amplía a superficie das prazas dos estacionamentos soterrados que son concesións do Concello». Vázquez indica que hay lucenses que echan de menos la ORA en determinados emplazamientos, como son el entorno del parque Rosalía de Castro, Ramón Ferreiro, el entorno del INSS, etcétera. Recordó la propuesta del Observatorio da Seguridade para que la primera hora de uso de los aparcamientos regulados sea gratuita.

El presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería, Cheché Real, indica que en algunos puntos de la ciudad es conveniente promover la rotación en el uso de las plazas de aparcamiento disponibles.

A su vez, Valentín Arias, portavoz de la Unión de Asociacións Veciñais, destaca que lo realmente urgente es la puesta en servicio de los aparcamientos disuasorios, si bien indica que también es preciso una regulación del tiempo de uso de las plazas de estacionamiento. Apunta que la creación de los párkings disuasorios va mucho más lento de lo deseable.

La ORA, un síntoma

Que Lugo necesite o no la ORA, es una cuestión opinable. Lo indiscutible es que el gobierno local no ha sido capaz en tres años de establecer un sistema de control de aparcamientos alternativo al que desmontó en 2015. Pero tampoco ha sido capaz de poner en práctica el nuevo plan de transporte público y los aparcamientos disuasorios no pasan aún de ser una promesa. La ORA es solo un síntoma de lo que le ocurre a Lugo.

Agosto de 1985: con las primeras multas, arrancó el largo rosario de protestas

El 19 de agosto de 1985, el Boletín Oficial de la Provincia publicó el reglamento de la Policía Local, que, entre otras cosas, establecía que, por la prestación del servicio, los agentes no podrían admitir «dádivas monetarias ni en especie». En la misma normativa se fijaba la obligación de los policías municipales de saludar militarmente al presidente de la corporación, al concejal delegado para este cuerpo, a los superiores jerárquicos, a las autoridades judiciales, a todos los concejales y a los mandos del Ejército y de los cuerpos de seguridad. Esta noticia, con despertar interés entre los lectores de La Voz, no suscitó tanto como la que recogía que en esa misma jornada había entrado en vigor, con todas las consecuencias, denuncias incluida, el sistema ORA de regulación de aparcamientos.

Previamente, el sistema había funcionado a prueba durante una semana. Con las multas, llegaron las primeras protestas por culpa de la ORA, que sobrevivió hasta julio de 2015.