El último acto con todas las asociaciones se celebró en el parque de Rosalía de Castro
20 jun 2018 . Actualizado a las 21:45 h.Con algunas caras de cansancio, después de tres días de intensa actividad, las asociaciones se despidieron de Arde Lucus con un acto final en el parque de Rosalía de Castro, que congregó a las legiones romanas y a las tribus castrexas. Cambiaron el guion habitual y en lugar de la última batalla entre tropas romanas y galaicos, con la consiguiente firma de un pacto, en esta ocasión el abrazo final no fue después de pelear, sino de recuperar a los niños de ambos bandos contendientes,
Escenificaron el secuestro de los niños de ambos bandos, de los que se culpaban mutuamente. Fueron las mujeres las que pusieron orden, hubo una ofrenda a los dioses y los hijos regresaron de entre el público sanos y salvos. Hubo abrazo de despedida hasta el año próximo, pero sin violencia.
El cambio en el guion no resultó satisfactorio para todos los espectadores que esperaban, al igual que el pasado año, ver cómo se libraba una batalla, con golpes supuestamente ficticios, pero que acababan con alguno sangrando.