Los maderistas reclaman que se amplíe la declaración responsable en las cortas

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

LUGO

Carlos Castro

La agilización en los expedientes ha permitido la gestión eficiente de 2,3 millones

09 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El peso del sector forestal en la provincia de Lugo ha supuesto que en el último año superara los 2.000 millones de euros de facturación, de los que 800.000 fueron para la exportación. Su importancia quedó de manifiesto en la asamblea de la la Asociación de Empresarios de Primera Transformación de la Madera. Esta patronal reunió ayer a más de 150 asociados para analizar las situación del sector, sus problemas y sus retos. La carga burocrática que soportan para poder llevar a cabo esta actividad es el principal escollo con el que se encuentran las empresas, según puso de manifiesto el presidente de esta organización, Daniel Díaz Ramos.

Al final de la asamblea estaban previstas las intervenciones del conselleiro de Economía, Francisco Conde y de la de Medio Rural, Ángeles Vázquez, que se incorporó en la comida.

Díaz Ramos mostró su satisfacción por los resultados obtenidos con el sistema diseñado para la simplificación de los trámites de las cortas, a través de una declaración responsable. Sin embargo, según reclamó el presidente del colectivo, es necesario ir más allá y aumentar el porcentaje de talas que se realizan de esta forma, que suponen el 30%.

Díaz Ramos le explicó al conselleiro de Industria, Francisco Conde, que el camino recorrido había supuesto un impacto económico en optimización de logística y gestión eficiente de 2,3 millones. El objetivo es llegar a 7,6 millones.

Carlos Castro

Conde también habló de este problema y expuso ante unos 150 maderistas que participaron en la asamblea, que la implantación de las normas sobre simplificación administrativa ha supuesto que 2.282 expedientes de corta se tramitaran mediante la declaración responsable. Por el momento está permitido que lo utilicen en montes ordenados, en talas de uso doméstico o montes expropiados. Siguen existiendo procesos, según recordó Conde, que precisan un régimen de autorización diferente, como son las talas de madera quemada o los bosques con protección medioambiental. «Ao longo do ano -dijo Conde- o compromiso é o de ampliar os ámbitos de cortas a novos procesos». Según dijo, será posible porque dispondrán de información georeferenciada.