Las salas Dumas, de la rúa Castelao, cerraron hace 13 años y desde entonces el local no tuvo más actividad
24 may 2018 . Actualizado a las 22:27 h.«Se é verdade o que se comenta, non pode haber mellor destino para un baixo nesta rúa que o dun aparcadoiro». Esta manifestación es de un empresario de la rúa Castelao donde en los últimos tiempos comenzó a ser vaciado el bajo que durante 16 años fue cine. En la calle hay varias versiones que apuntan a que las viejas salas cinematográficos pasarán a ser un aparcamiento de coches en una calle en la que prácticamente no hay donde aparcar ni de día y, a veces, también es complicado por la noche. La proximidad al centro motiva que la rúa sea una de las más saturadas en cuanto a vehículos de la ciudad.
Confirmar el próximo destino del bajo de Castelao 43-45 no fue ayer posible. Varios vecinos de la zona dijeron tener referencias de que serviría como párking, pero desconocen detalles referidos a cuándo comenzará a funcionar. En la zona comprobaron como el local, que permaneció cerrado desde las últimas proyecciones, registró cambios, posiblemente debido a la retirada de algunos materiales. Desde hace unas semanas también es posible ver lo que queda en su interior a través de las verjas de cierre de la instalación.
Lo que parece estar muy claro es que a muchos bajos de la rúa Castelao les cuesta encontrar un uso. De hecho hay casi una decena cerrados y en algunos cuelga el letrero de venta. En la calle también hay un gran solar cerrado con un muro pintado de blanco. «Na rúa falouse moito de que para ese solar viría o aparcadoiro que está na Rúa do Teatro, no caso de que peche por diversas cuestións relacionadas co Concello. Se así fora, podería ser un bo atractivo para algúns dos negocios que quedan na rúa», apuntó el responsable de un establecimiento de la calle que antiguamente era la principal ruta para ir a la estación de tren.
Los multicines Dumas nacieron en agosto de 1989. No fueron recibidos con júbilo por algunos cinéfilos porque creían que acabarían con las salas veteranas. Incluso cuando empezaron a funcionar les pusieron múltiples pegas por la colocación de las butacas, ya que si tocaba delante un espectador de una estatura superior al 1,75, había problemas para poder ver la pantalla en alguna de las tres salas que estuvieron dedicadas a los Tres Mosqueteros.
Pero con el paso del tiempo, los espectadores más críticos acabaron cediendo al darse cuenta de que podían ver películas bastante aceptables y además con unos precios muy bajos, especialmente el día del espectador.
Pero los Dumas no aguantaron y el empresario acabó cerrándolos el 15 de diciembre de 2005. La película argentina Elsa&Fred, en la sala Athos; La novia Cadáver, de Tim Burtob, en el Porthos y Una Vida por delante, del sueco Lase Hallstrom, en el Aramis, fueron las últimas proyecciones en el cine de esta calle en la que llegó a funcionar el Castelao.