La "oferta" de Rubén Arroxo fue para denunciar unos vertidos al río Rato
27 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El portavoz del BNG, Rubén Arroxo, se presentó ayer en el pleno con un pequeño bote de plástico conteniendo aguas fecales provenientes de la zona de A Garaballa. A la hora del vermú ofreció a los ediles de la corporación que probaran o «cheiro». Solo uno se animó: Manuel Núñez, el concejal de infraestructuras. Tomó el frasco y lo olió, sin embargo parece que no consiguió captar el «aroma» debido a las consecuencias del consumo de tabaco.
Arroxo fue a recoger el agua a las proximidades de un pozo de tormenta que nunca llegó a estar operativo y que hace que aguas contaminadas vayan directamente al río Rato en la zona de A Garaballa. Los vecinos del lugar están molestos por el mal olor que ocasiona y también por las colonias de mosquitos que hay en el verano. «E o Concello mira para outro lado», dijo Rubén Arroxo. Los nacionalistas presentaron una proposición en la sesión para solucionar la situación.
Fuentes nacionalistas recordaron ayer que el BNG denunció reiteradamente la situación, actuó el Seprona y la Confederación Hidrográfica planteó una sanción al Concello. La solución, dijo Arroxo, es que la institución municipal se haga cargo del pozo de tormenta y lo dote de electricidad para que puedan funcionar las bombas y así evitar la contaminación actual.