El misterio del hombre del maletín que ofreció medio millón a jugadores del Lemos por dejarse perder

LUGO

Alex Carausan

Sucedió en abril de 1988 antes de un partido en Cambados

16 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Esta curiosa historia, que ocurrió hace 31 años, tiene como protagonista principal a un misterioso hombre del maletín que se «apareció» a dos jugadores del Club Lemos. Sucedió en la noche del miércoles 20 de abril de 1988, a unos días vista de un partido que el club monfortino tenía que disputar ante el Cambados en terreno ajeno. Se trataba de un partido decisivo porque los dos equipos se estaban jugando en aquella temporada el ascenso a la Segunda División B.

Los hermanos Poldo y Manolo, laterales del equipo monfortino, recibieron el ofrecimiento por parte de un desconocido de medio millón de pesetas si conseguían que el equipo se dejase perder en el partido ante el Cambados. Eso lo contó la directiva monfortina y ya se pueden imaginar la gran polémica que se suscitó entre las aficiones de los dos clubes.

Los dos jugadores recibieron la visita del hombre del maletín en Ourense, ciudad en la que trabajaban y residían. De inmediato, los dos jugadores se pusieron en contacto con Joel Castro, el entrenador del club, que también residía en la ciudad de As Burgas. «Quiero hacer mención a que ese señor nunca dijo hablar en nombre del Cambados. Simplemente ofreció el medio millón de pesetas a título personal», explicó el entrenador del club que puso el caso en conocimiento de la directiva a los efectos oportunos.

Las informaciones de aquel entonces dicen que el misterioso ofertante prometió dar el dinero antes del partido. «Si ganábamos en Cambados había que devolverlo. Si perdíamos, el dinero era para repartir entre todos», recordó el que era técnico del club, Joel Castro.

A partir de ahí comenzó la «película». Algunos aficionados dijeron saber de buena tinta que el hombre misterioso llegó a mostrar el maletín a los dos jugadores e incluso lo abrió para que vieran que estaba lleno de dinero. Ya se sabe que la desconfianza cuanto más lejos, mejor.

Trascendieron también otros aspectos de la supuesta conversación. «Non vos preocupedes por nada porque as dúas directivas xa están ao tanto do asunto», diría el hombre del maletín a los jugadores. ¿Y quién o cómo era ese señor? «No debía ser de Ourense, porque en esta ciudad nos conocemos todos y si fuese conocido segurísimo que lo controlaban los jugadores», dijo el entrenador a los medios.

«Como el asunto no es demostrable, lo primero que hice fue ponerlo en conocimiento de la directiva. Nuestra conciencia tiene que estar por encima de las estrellas y los jugadores han de quedar salvaguardados. En este caso solo quedaban dos alternativas: cobrar o advertir de lo ocurrido», dijo el técnico.

Por aquello de la intriga, quedó para el final el resultado del partido: Cambados, 1; Lemos, 0.

En la foto que acompaña esta información, Joel Castro, que era entrenador del club lemista