La psicóloga de Alcer, Patricia Casal impartirá un taller el lunes y el martes
07 abr 2018 . Actualizado a las 21:58 h.La asociación Alcer organizó un taller que se desarrollará el lunes y el martes y que está dirigido a pacientes con insuficiencia renal crónica y a familiares. Con esta iniciativa pretenden tender un puente de comunicación entre ambas partes y tratar de solucionar algunos problemas que surgen frente a esta enfermedad que supone que en Lugo cada año empiecen con tratamiento sustitutivo del riñón 50 personas. Quinientas ya lo están, unas trasplantadas y aproximadamente la otra mitad, acuden a diálisis, hemodiálisis o están en diálisis domiciliaria. La persona encargada de dirigir el taller en la psicóloga de Alcer Patricia Casal Vázquez, que lleva desde el año 2010 trabajando para esta asociación, salvo entre 2012 y 2015.
Según Patricia Casal, Alcer, en anteriores jornadas se centró en los pacientes y en la enfermedad. Ahora ha dado un paso al frente e incluye también a las familias. «El diagnóstico de la enfermedad se lo dan al paciente pero repercute en todo su núcleo familiar». «A veces ?añadió? se producen cambios de roles, como hijos que pasan a asumir el papel de padres, algo que no es fácil de llevar, sobre todo al principio».
La psicóloga insiste en que «hay que asimilar el diagnóstico, saber a qué te vas a enfrentar y cómo te vas a adaptar a la nueva situación, ademas de recomponer el funcionamiento familiar».
«El diagnóstico de la enfermedad renal lleva aparejado en numerosas ocasiones tener que dejar de trabajar ?dijo? lo que también lleva aparejadas repercusiones en el ámbito económico de la familia e incluso en el modo de alimentarse».
Enfermos más enfermos
En muchos casos, según admitió Patricia Casal, se suelen dar conflictos. «Una de las cosas sobre las que vamos a hablar ?dijo? es sobre la comunicación». La profesional explicó que en ocasiones por no preocupar a la familia, el enfermo no cuenta cómo se siente. Las personas más próximas pueden optar, o bien no parar de preguntar sobre cómo se encuentra, o no hacerlo para no generar inquietud entre la otra parte. «Al final ?explicó la psicóloga? se generan problemas de comunicación».
«Es normal ?señaló? estar triste y tener miedo y de eso hay que hablar para mejorar la comunicación, aunque respetando los silencios o buscando recursos, como por ejemplo un amigo, con el que compartir las inquietudes fuera del hogar».
Ante la pregunta de cuáles son las sugerencias como experta, Casal cree que hay veces en los que la familia se vuelca con el paciente y cambia radicalmente su forma de vida para enfocarla hacia la enfermedad. «Hay que buscar momentos propios, tanto en el caso del cuidador como del enfermo y disponer de alguna persona fuera de este ámbito para desahogar».
La sobreprotección es, según la psicóloga, una de las constantes en la mayoría de los casos. «Lo que hace ?añadió? es fomentar más el rol del enfermo». «Algún paciente ?manifestó? llegó a reconocerme que lo protegían tanto que se sentía todavía más enfermo».
Respetar espacios y silencios
La recomendación de la profesional para los familiares se basa en que está bien cuidar y apoyar. «Hay que hacerlo ?añadió? respetando espacios y silencios y sin sobreprotecciones, mejorando la comunicación, a sabiendas de que cada paciente tiene su momento y puede que en un principio no quiera hablar, pero después se abre».
En cuanto a los pacientes a los que atiende semanalmente en todas las unidades de hemodiálisis dice que es importante que aprendan a convivir con la enfermedad. «Es como una parcela más de la vida, no la única, por lo que se pueden hacer muchas cosas más».
La psicóloga interviene a petición del paciente, pero también de los médicos y de las enfermeras, cuando encuentran evidencias de que necesita ayuda. Otras veces es el enfermo el que quiere que traten a su familia.
«Cuando estos pacientes hacen hemodiálisis tres días en el hospital o en casa ?señaló? el cambio es brutal. Hay otras enfermedades crónicas más conocidas que la insuficiencia renal y lo que pretendemos es facilitar información sobre ella».
La psicóloga pretende que en el taller, que se celebrará en el Uxío Novoneyra, de de 5 a 7.30 de la tarde, tanto el lunes como el martes, en el que podrán participar 25 personas, los pacientes y sus familiares expongan sus miedos y cuenten como están.