Un joven ganadero salva su vivienda por solo cinco minutos

Suso Varela Pérez
suso varela CERVANTES / LA VOZ

LUGO

OSCAR CELA

Los vecinos de San Martín regresaron a su aldea y se encontraron coches y alpendres calcinados

17 oct 2017 . Actualizado a las 13:34 h.

A algo menos de dos kilómetros de O Pando, ladera hacia abajo, se encuentra la aldea de San Martín. Su docena de vecinos tuvieron que ser desalojados el domingo sobre las ocho de la tarde, abandonando a su suerte sus vivienda, el ganado y sus perros. Cuando regresaron ayer por la mañana el paisaje era bastante desolador. Además de la arboleda y la superficie quemada, se encontraron con dos turismos calcinados, al igual que aperos de labranza y un alpendre, que en tiempos fue vivienda, totalmente en cenizas. «Dixeronme que a miña casa se salvou por cinco minutos». Quien así habla es Alberto, un joven de 25 años y que vive de las 14 reses de ganado, y que ayer estuvo a punto de perderlo todo por el voraz incendio. Alberto, como otros jóvenes del municipio, estuvieron trabajando codo con codo con vecinos y cuadrillas para evitar la propagación del fuego. «Non durmín en toda a noite, pero había que intentalo», señala Alberto.

OSCAR CELA

Los perros, todos juntos

En esta aldea de San Martín, que se quedó sin luz al quemarse las líneas, y en la que llevan semanas sin agua, los vecinos fueron recuperando la normalidad con el susto en el cuerpo. Jesús, un septuagenario que vive de su ganado, regresó sin saber si sus vacas estarían vivas o no. «Ao final pudieron escapar cara abaixo do río, pero o que non puiden salvar foron decenas de rulos de palla», se lamentaba. Quienes sí se quedaron en la aldea evacuada fueron los perros, mastines y alemanes. «Cando regresamos, estaban todos xuntos, deitados xunto á esquina dunha casa e co medo no corpo».

OSCAR CELA