La A-8, cortada de nuevo en el tramo negro tras dos cierres en el fin de semana

LUGO

Las interrupciones se avisan ahora con semáforos y señales en Lourenzá y en Abadín

19 dic 2016 . Actualizado a las 13:08 h.

El tramo negro de la A-8 se ha cerrado poco después de las doce y media del mediodía. La niebla obliga una vez más a prohibir la circulación en los 16 kilómetros que van de Arroxo (Lourenzá) a A Xesta (Abadín), unha situación que ya se presentó dos veces el pasado fin de semana.

El sábado, alrededor de las ocho de la tarde, el tramo se cerró y no se reabrió hasta las once y media de la mañana de ayer. A las seis de la tarde de ayer se cerró de nuevo y continuó así hasta las doce menos cuarto de la noche.

Desde la semana pasada, gracias al nuevo sistema de control instalado por la Dirección General de Tráfico, los cortes se tramitan directamente en el centro de gestión que tiene su sede en A Coruña. El automovilista que circula por la transcantábrica se encuentra, poco antes de las rotondas situadas en Arroxo y en A Xesta, con un panel que le notifica el cierre, como ya ocurría antes. La novedad está en las luces rojas que se iluminan en la calzada y en las señales que funcionan en las rotondas: un semáforo con luz roja y un indicador de dirección prohibida que se activa sobre un panel informan del cierre.

Lo que no ha cambiado es la alternativa a las interrupciones en la A-8: como antes, cuando los cierres se hacían visibles con la colocación de bolardos que impedían el acceso en las rotondas, el tráfico debe circular por la N-634.