Sánchez-Montaña señala que su teoría se apoya, además de en su propia formación técnica, en el plano de la ciudad de Lugo dibujado en 1864 por el cartógrafo y militar español Francisco Coello de Portugal y Quesada, en el que -señala- se recogen los muros del edificio existente frente a la Porta Miñá. Dice que en la delegación del COAG se expone una fotografía aérea de Lugo, de los años 60, en la que se aprecia la existencia de parte de los muros dibujados por Coello cien años antes. Igualmente señala que en un texto para especialistas, en el tomo hispano de la serie Epigrafia anfiteatrale dell’Occidente Romana, el profesor Joaquín L. Gómez Pantoja al enumerar los anfiteatros conocidos en las tres provincias de Hispania reseña el de Lucus Augusti.