El PSOE pregunta en el Parlamento «polo estado de abandono» de Santa Eulalia de Bóveda
25 nov 2016 . Actualizado a las 12:52 h.Llueve y llueve y además de los campos y paseos fluviales destrozados por las inundaciones, monumentos con las peculiaridades de Santa Eulalia de Bóveda sufren la humedad, afectando a sus pinturas y relieves. La fracturas de algunas imágenes grabadas en la piedra o en los famosos frescos están a la orden del día, y aunque la Xunta está acometiendo obras de control y limpieza durante cada estación del año, sigue a la espera de un informe global que permita acometer los trabajos más oportunos para evitar un desastre en el templo. El objetivo, señalan fuentes de la Xunta, es no cometer errores como en el pasado, y que acabaron repercutiendo negativamente.
La situación de deterioro de esta joya del siglo IV -que recientemente fue analizada por la primera tesis doctoral, de Enrique Montenegro, atribuyendo su finalidad a un templo funerario dedicado a Dioniso- llegará al Parlamento gallego a través de una batería de iniciativas para «denunciar a total pasividade e abandono do monumento». La diputada Concepción Burgo afirma en el escrito presentado ante la mesa de la cámara para su respuesta en pleno que «se necesitan continuos traballos de vixiancia e mantemento para evitar o seu deterioro».
Los socialistas instan a la Xunta a que de forma «inmediata» actúe en los problemas «manifestos» que se aprecian en el templo, y pide que elabore en menos de seis meses un plan conjunto y ambicioso de investigación, rehabilitación, conservación y puesta en valor de Bóveda y de su entorno.
La zona norte del templo es la más afectada por la humedad. En determinadas épocas del año se pueden apreciar sus paredes mojadas. Con la entrada de calor, las gotas de agua se secan y la sal se cristaliza, provocando las roturas en las pinturas. Se pueden ver colonizaciones biológicas, condensación, fracturas o filtraciones de agua continuas.
los daños
La imagen del ave dañada es uno de los ejemplos más evidentes de los desperfectos que tiene el templo por dentro. En la otra imagen se puede ver el polémico «emparrado» que se colocó a inicios del siglo XX para evitar la entrada de palomas y otras aves. El monumento está lleno de maleza a ambos lados de la entrada, y que afecta a los muros.