Luna de miel a bordo del Alvia

xosé Carreira LUGO / LA VOZ

LUGO

XOSÉ CARREIRA

La familia de los recién casados les preparó un concurso en el que ganaron uno de seis viajes posibles

03 feb 2016 . Actualizado a las 09:40 h.

El tren sigue siendo fuente de historias únicas y el nuevo Alvia Lugo-Madrid tuvo unos protagonistas de excepción: María y Álvaro, una pareja de recién casados que disfrutaba su luna de miel. Contrajeron el sábado en Vilalba y cuarenta y ocho horas después ya ocupaban plaza en el estreno del convoy blanco y violeta que tiene la firma de Talgo.

Y no es que optaran por darse un garbeo en tren después de la ceremonia. No. Se iban a Islandia. Tenían programado volar el martes y regresar dentro de una semana. Y de nuevo volverán a casa en el Alvia porque, dijeron, el tren «é moito máis interesante que o autobús e agora vai reducindo tempos de duración da viaxe».

María es de Vilalba y Álvaro de Ribadeo. Ayer se encontraron con la protesta en la estación y atravesando entre los concentrados y la gran pancarta, llegaron al convoy. «Non sabíamos nada da queixa», advirtieron.

Pero lo de la luna de miel de esta joven pareja tiene trastienda, y mucha. Resulta que el viaje es un regalo de bodas de sus familias. Y la cerebro de todo fue Carmela, una hermana de Álvaro. Tendrían que ver la guía que les confeccionó para darse cuenta de como se lo curró. No quedaba ni un solo detalle. Por capítulos, y con iconos perfectamente reconocibles a la primera, los dos viajeros tenían información del autobús al que tenían que subir en cada momento, la distancia a recorrer y otra serie de detalles que nos gustaría que incluyera la guía que nos compramos cuando hacemos un viaje.

Pero si Carmela se lo trabajó, y mucho, haciendo la guía, más se esmeró en la hora de elegir los destinos. Y es que María y Álvaro no se van a Islandia así porque sí. Fueron ellos los que desvelaron cómo sucedió todo.

Al puro estilo de un concurso, que en su día presentó en la tele Jesús Vázquez, Carmela les preparó al dedillo seis viajes. Cada uno lo metió en una caja y por fuera anotó unos números a modo de difíciles pistas para el joven matrimonio. El siguiente paso era jugar y acertar.

Los viajes contenidos en las cajas y sus números eran los siguientes. 1989, Berlín; 15, Florencia; 118, un crucero y una cena en el carnaval de Venecia; 26, viaje en tren por Suiza; 16, ruta de cuatro por cuatro, por Escocia con parada en varios castillos y por último, 874, Islandia. «O 1989 foi o ano en que caeu o muro de Berlín; 16 é o resultado de multiplicar 4x4... Todos os números tiñan algún significado. Ao final conseguimos Islandia», explicó Álvaro. Y ya que la cuestión va de cifras y fechas, la pareja advirtió que se casó el día en que nació Castelao.

Carmela lo hizo todo de manera tan cuidadosa que, a mayores de la guía/hoja de ruta que les hizo detalladamente, les regaló la Lonely Planet de Islandia forrada con máxima pulcritud.

Y después de más de seis horitas en el Alvia y de dormir en Madrid hoy estarán en disposición de ver auroras boreales, icebergs y otra serie de bellezas del país cercano al Círculo Polar.