«San Froilán ya no es lo que era», dice la dueña de una churrería con 45 años en las fiestas

La Voz

LUGO

13 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Barraquistas y feriantes hacen un balance negativo de estas fiestas de San Froilán. Fueron tres los factores que jugaron en su contra: la elevada cuota a pagar por ubicarse en el ferial, el mal tiempo y el no contar con el Día del niño.

El dueño de un hinchable, que lleva 22 años viniendo a estas fiestas, comentaba que entre pagar 2.400 euros por situar su puesto y unos 3.000 en transporte, luz y personal, no le compensó. Tanto es así que salió con menos dinero de como llegó. Manifestaba que no pudo abrir los tres días claves a causa de la lluvia y que el propio Domingo das Mozas tuvo que cerrar su negocio a las 19.00 horas.

El propietario de otra atracción lamentaba que bajaron los clientes y que fueron muchos los días que cerraron antes de lo previsto por el mal tiempo. «Vengo de León, pagué 1.700 euros por el puesto, 200 euros de luz y tengo que pagar a dos empleados. No libro los gastos», lamentaba.

El dueño de otra barraca criticaba la subida de las cantidades económicas para colocar el puesto y la bajada de días de permanencia. Decía echar en falta el que no existiese el Día del Niño puesto que es una fecha de la que disponen todas las provincias y en la que los feriantes recaudan dinero a pesar de bajar los precios.

La propietaria de una churrería también se lamentaba del resultado. Lleva 45 años viniendo a estas fiestas y decía: «San Froilán ya no es lo que era».