La ruta discurre por viejos caminos de carro romano, senderos y aldeas, con inicio en O Couso y fin en Cabana de Cervantes. Además, incluye un tramo del antiguo Camino Real que enlazaba la Meseta con Galicia. Para el presidente del colectivo, es importante que el sendero sea un elemento dinamizador de la zona, ese es el objetivo, para «volver a mirar al interior de la provincia». Además, según Álvarez, este es un buen ejemplo de que «en tiempos de crisis se pueden hacer cosas serias», pues detrás de todo esto «hay mucho trabajo y mucha implicación por parte de las familias vecinas».
El campo de trabajo, además de labores de recuperación de la ruta, incluye talleres, como los de elaboración artesana de alimentos locales, que tienen mucho éxito.