El ulloano que planeó la muerte de su mujer en Venezuela fue condenado a 22 años

LUGO

CEDIDA

Jesús González Quintá admiitió su responsabilidad como inductor del crimen

07 jul 2015 . Actualizado a las 17:06 h.

Jesús González Quintá, natural de Antas de Ulla, fue condenaro a más de 2 años de prisión por la justicia venezolana tras haber admitido su responsabilidad como inductor del asesinato de su esposa, la hispano paraguaya María Luz Cristaldo López, ocurrido durante unas vacaciones en el país caribeño.

El ministerio público venezolano emitió un comunicado en el que explicaba el dictamen judicial sobre el lucense. «Fue condenado a 22 años 2 meses y 20 días de presión Jesús González Quintá, quien admitió su responsabilidad en la muerte de su pareja, la turista española María Luz Cristalo López, ocurrida el 15 de diciembre de 2014 en Maracaibo, estado Zulia».

El hombre está encarcelado en el Centro de Arresto y Detenciones Preventivas El Marite, una penitenciaria de la ciudad de Maracaibo, al oeste de Venezuela y fue condenado por la comisión de los delitos de «femicidio agravado en grado de determinador (inductor), asociación para delinquir y simulación de hecho punible».

El lucense no es el único imputado en este caso, ya que hay otras 11 personas presuntamente involucradas en este hecho y que también se encuentran detenidos en ese mismo centro. A todas les atribuyen haberse asociado para acabar con la vida de Cristaldo, posiblemente para cobrar un segurao de vida.

Los datos que se conocen sobre la investigación de la Fiscalía venezolana, la pareja llegó al país caribeño desde España en diciembre del 2014, salío del hotel en el que se hospedada en Maracaibo y solicitó el servicio de un taxi. El taxista se desvió de la ruta y llevó a la pareja a un terreno boscoso en el que esperaban dos hombres armados que les robaron todo lo que llevaban. Cuando el matrimonio intentaba escapar, los hombres le dispararon a la mujer y le causaron la mueste.

La primera versión que ofreció Jesús González a la policía fue que el conductor del taxi les había trasladado a un lugar en el que otros maleantes les esperaban y que, después de robarles, les intaron a dejar el sitio corriendo y sin mirar atrás, mientras les disparaban.

Tres días después de suceder los hechos, la investigación dio un giro inesperado cuando integrantes de la policía científica venezonala informaron de que el cónyuge de Cristaldo había planeado el homicidio en España con un cómplice, quien le delató e informó sobre el móvil del crimen tras ser interrogado.