El acusado de violar a una camarera dice que no le tocó y que ella tenía los pantalones bajados

Echar balones fuera construyendo situaciones que pueden resultar difíciles de creer para el tribunal. Esa fue la táctica que utilizó hoy en la Audiencia Provincial de Lugo, Ernesto Bugliot Mato, el hombre que va camino de sumar una de las penas de prisión más altas de la provincia de Lugo. En esta ocasión lo juzgaron por violar, intentar robar y lesionar a la camarera de un pub lucense en la noche del 15 de marzo de 2013. También le atribuyen el asalto a otra mujer en un callejón de la plaza de abastos de Lugo. En este caso, según el fiscal, se introdujo en su coche, le robó el dinero utilizando un objeto contundente y posteriormente trató de que le hiciera actos libidinosos. La mujer, con mucha sangre fía, consiguió abrir la puerta de su coche y ponerse a salvo.

Bugliot dijo ser totalmente inocente. No hizo nada en los dos casos, aseguró. Estuvo en el pub de la ronda, tomó unas consumiciones, pero no violó a la camarera que, según dijo, resultó herida en la cabeza porque le cayó una botella de licor de la estantería de la barra. Dijo que al pasar para detrás de la barra para preguntar unos precios se quedó sorprendida porque ella tenía los pantalones bajados. En cuanto a la segunda mujer explicó que no la conocía de nada.

La camarera relató detalladamente como ocurrieron los hechos. Dijo que el acusado no solo le robó la recaudación de la caja del establecimiento sino que la había agredido sexualmente. Además le dio puñetazos, paraguazos y la obligó a  beber alcohol de una botella. 

La otra víctima también contó como la robó y dijo que no había conseguido sus intenciones libidonosas porque llevaba puesto un abrigo y a posteriori logró escapar. El fiscal pide que sea condenado por los numerosos delitos que le atrbuye con una pena de cárcel de más de 30 años.

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