Fomento abre tres tramos de la autovía Lugo-Santiago entre las críticas de la oposición por electoralismo

Suso Varela / E. Á. / M. Ch. LUGO, SANTIAGO / LA VOZ

LUGO

Oscar Cela

Fomento inaugura 23 kilómetros de la A-54 y se compromete a licitar el tramo Palas-Arzúa este mismo año

31 mar 2015 . Actualizado a las 01:38 h.

El afán inaugurador no pasó desapercibido para la oposición. El socialista Abel Losada se mostró sorprendido tras el «ritmo inexplicablemente lento» del AVE A Coruña-Vigo, por esta aceleración de las obras «cando se aproxima a data electoral correspondente». Losada se alegró no obstante de que las dos ciudades estén unidas por la alta velocidad, pero le recordó a la ministra de Fomento, Ana Pastor, «a preocupación polos túneles de conexión coa meseta tapiados». También AGE y BNG censuraron la furia inauguradora del PP. Antón Sánchez, de AGE, criticó el «electoralismo coas obras públicas», criticando un sistema insostenible como es el de la alta velocidad. Xavier Vence, portavoz del BNG, aseguró que sobró el despliegue inaugurador cuando esta infraestructura ni siquiera está en funcionamiento.

Por su parte, el PPdeG respondió a la oposición enmarcando el maratón de ayer en la «normalidade dos procesos democráticos». Además, por boca de su portavoz parlamentario, Pedro Puy, afeó a PSOE, AGE y BNG que critiquen al Ejecutivo por materializar su programa electoral. «Aqueles que preferían sacar vantaxe de que o Goberno non fixera nada -espetó- atópanse coa realidade de que si fixo as cousas. [...] É un Goberno que rende contas fronte a uns rivais que, en vez de pedir outras cousas que se puideran prometer, botan en cara que se cumpra aquilo que se dixo que se ía facer».

Justo en el límite que marca la ley para las inauguraciones antes del período electoral y con prisas de última hora en el acabado de las obras, ayer se abrieron al tráfico los tres primeros tramos en la provincia de Lugo de la autovía que conecta la capital lucense con la de Galicia, la A-54. Se trata de un trayecto de 23 kilómetros entre Nadela, donde enlaza con la A-6, y Guntín, donde enlaza con la carretera de Santiago, la N-547.

Aunque la apertura al tránsito de vehículos fue pasadas las ocho de la tarde, el acto de inauguración se realizó seis horas antes y a él acudieron el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, y el secretario general de Infraestructuras de Fomento, Manuel Niño, quien señaló que a finales de año se abrirán otros 15 kilómetros de la A-54, hasta Palas de Rei, y anunció que los 28 kilómetros entre Palas y Arzúa saldrán a licitación este mismo año. La autovía se completa con otros dos trazados, desde Arzúa a Lavacolla, actualmente en obras y con previsiones de obras en el 2017, y de Lavacolla al periférico de Santiago, inaugurado por el presidente Aznar en 1999.

Los tres tramos abiertos ayer por Fomento, con un coste de unos 177 millones de euros, suponen un avance en seguridad, ya que el trazado de la actual nacional destaca por su alta siniestralidad, y en comodidad para los conductores, especialmente para los que vengan o regresen en dirección a Madrid. La A-54 no termina en Lugo, aunque se está construyendo un enlace de unos tres kilómetros para acercarla a la ciudad. Este vial está previsto que se termine este septiembre.

En el acto de inauguración, el presidente de la Xunta señaló que esta autovía supone un paso para «vertebrar o interior de Galicia e conectar Lugo co eixo atlántico». Además quiso resaltar «o mérito que ten facer infraestruturas en tempos de crise» y aprovechó para criticar al Gobierno socialista, «que deixou expropiacións por pagar».