Vendex contrató al hijo del policía local acusado de filtrar la ordenanza de la ORA

Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

LUGO

El policía, con visera, el día en que declaró como imputado hablando con su abogado.
El policía, con visera, el día en que declaró como imputado hablando con su abogado. ÓSCAR CELA< / span>

De Lara encarga a Aduanas que investigue las actividades económicas del agente

01 oct 2014 . Actualizado a las 05:07 h.

El hijo del policía local encargado de coordinar el servicio de la ORA, Manuel García Ferreiro, fue contratado por el grupo Vendex, el mismo al que pertenece Doal, la empresa que se llevó el polémico contrato de la zona azul de Lugo. La jueza de la Pokémon, Pilar de Lara, da cuenta de esta situación en un auto que difundió ayer en el que concede autorización a los funcionarios de Vigilancia Aduanera adscritos a la investigación para consultar y aportar los datos informáticos fiscales, de la Seguridad Social y Trafico de las bases de la Agencia Tributaria del policía, su hijo y varios familiares de ambos, así como también de un ingeniero municipal Luis García Padín. Este y Manuel García Ferreiro se encuentran imputados en la Pokémon.

Entiende la magistrada que «la contratación del hijo de García Ferreiro, en pleno proceso de adjudicación del sistema ORA puede considerarse como una contraprestación a los «favores» que ya entonces y en el futuro pudiera prestar el funcionario de la Policía Local imputado, lo que ha de llevar a la investigación de dicha contratación».

La jueza también busca datos relativos a la actividad económica y fiscal de los cinco familiares y del técnico. Asimismo, envió un oficio a la empresa Sermasa (filial de Vendex en la que trabajó el hijo del policía) para que le digan la fechas de alta y baja, el motivo del cese, los puestos de trabajo que ocupó, la categoría profesional, funciones, nóminas y toda clase de retribuciones y el horario laboral.

Dice la juez que, a través de las diligencias de instrucción que practicó y del informe de Vigilancia Aduanera, se infiere que el hijo del policía local, Manuel García Ferreiro, ha estado trabajando para Sermasa, perteneciente al grupo Vendex, desde el 30 de mayo de 2009 hasta el 31 de agosto de 2012 en que pasó a trabajar para otra empresa internacional.

«Esta circunstancia -dice la jueza en su auto? cobra especial relieve habida cuenta de que a la fecha de su contratación se hallaba en trámite el proceso de adjudicación del sistema ORA en el término municipal de Lugo, el cual se adjudicó definitivamente a Doal -empresa también del grupo Vendex- en julio de 2009, pero ya en abril de ese mismo año (por tanto un mes antes de la contratación del hijo de García Ferreiro) estaba adjudicada provisionalmente a dicha firma».

Advierte la magistrada que «debe tenerse en cuenta que, aún cuando hasta diciembre de 2009 no tuvo un nombramiento oficial, García Ferreiro en la práctica venía ocupándose del control y funcionamiento del sistema ORA, tal y como evidencian las conversaciones telefónicas interceptadas».

Cuenta la instructora de la Pokémon que en diciembre de 2009 el policía local, conocido en la operación como el Tiralíneas (porque era quien se ocupaba de establecer las plazas de la zona azul), fue nombrado responsable del contrato de gestión de la ORA junto con el ingeniero municipal Pablo Fuentes Faílde, que también figura como imputado en las diligencias de la macrooperación que sigue abierta en Lugo. Pilar de Lara entiende que lo anterior «supone en la práctica, que entre otras cuestiones es el encargado de controlar el cumplimiento de las mejoras del sistema ORA y de la realización de informes sobre la prestación de dicho servicio».

Filtraciones

La jueza De Lara recuerda que al que era jefe de la sección de tráfico de la Policía Local de Lugo se le atribuye la filtración del borrador conteniendo la ordenanza de la ORA al encargado de la misma, Javier Reguera, que también está imputado en la causa. Supuestamente este le pasó el documento al jefe de Vendex en Galicia, José María Tutor Lemos.

La aprobación del borrador habría supuesto una ampliación considerable de la zona de aparcamiento pagado en la vía pública para la empresa Doal. La pretensión era llevar la zona azul incluso a barrios de la ciudad como es el caso de A Milagrosa.

La ampliación de la zona azul consistía en un aumento de 1.200 plazas, lo que suponía una buena fuente de ingresos para la empresa. De hecho el jefe de Vendex no cortó el supuesto envío de sobres en espera de esta mejora.

La jueza cree que la entrega fue realizada a Reguera y a José María Tutor

El guardia municipal trabajó en la ampliación de 1.200 plazas para aparcar