Confirman la presencia de un oso en núcleos de Lóuzara

Xosé Ramón Penoucos Blanco
x. r. penoucos SARRIA / LA VOZ

LUGO

yolanda marcos

El plantígrado dejó varias huellas cerca de las colmenas que destrozó

11 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Los destrozos ocasionados en dos zonas de colmenas del núcleo de Praducelo en la parroquia samonense de Lóuzara fueron originadas por un oso, tal y como se deduce tanto por los restos de pelo del animal como por las huellas que fueron encontradas a pocos metros del lugar en el que se produjeron los hechos.

El primer lugar en el que se encontraron evidencias de la presencia del plantígrado fue una zona con cinco colmenas que una familia utiliza únicamente para uso propio. Una de ellas estaba tirara en una carretera próxima, otra en una pista cercana y las tres restantes habían sufrido serios daños.

La persona que las encontró asegura que en primer lugar pensó que los daños habían sido causados por un jabalí ante lo inusual que supone la presencia de un plantígrado en la zona. Poco después al meditar sobre los destrozos ya se convenció que el autor de los mismos tenía que haber sido un oso. «Las colmenas estaban fuera de sitio y en algunas solo faltaba la tapa, por lo que el escenario no coincidía con la actuación de un jabalí, así que ya pensé que había sido un oso», explicó José Celeiro.

Una vez arregladas en parte las colmenas, esta persona se dirigió hacia otra finca en la que su familia también tiene abejas. «Tenemos unas once colmenas y al llegar al sitio ya detecté que dos estaban completamente rotas y otras cinco sin tapas. El escenario apuntaba con claridad a la actuación de un oso y por ello ya apenas me quedaron dudas», expresó José Celeiro, quien tras evaluar los daños trató de salvar las colmenas que todavía podían recuperarse.

En esa primera inspección no encontraron evidencias de la presencia de un plantígrado, pero poco después los propietarios de otras colmenas de la zona encontraron en una zona próxima huellas que denunciaban claramente la presencia de un oso. Las garras del animal quedaron perfectamente marcadas en varios lugares en los que la tierra estaba húmeda.

La presencia de este tipo de animales en esta zona es muy poco habitual. El último caso que se conoce se produjo hace unos cinco años cuando se confirmó el ataque de un oso a unas colmenas de la empresa Mel da Anta en la zona de Toca, también en el Concello de Samos. En un lugar muy próximo a Praducelo también hay colmenas de esta empresa, pero en esta ocasión no sufrieron ningún tipo de año.

Agentes del Seprona están estudiando el caso.

La persona que las encontró pensó al principio que eran daños de un jabalí

Hace años en la misma zona ya se detectó la presencia de algún oso