Obreros de Guitiriz reclaman a UGT responsabilidad por impago

Xosé María Palacios Muruais
Xosé María Palacios VILALBA / LA VOZ

LUGO

Once empleados de una fábrica desaparecida acuden al juzgado

15 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Once obreros de la fábrica Cerámicas Industriales de Galicia, que funcionó en los alrededores de Guitiriz y que ya cesó en su actividad hace años, han decidido acudir a la vía judicial para exigir al sindicato UGT y a su asesoría jurídica responsabilidades por cantidades cuyo cobro esperan desde hace tiempo.

El origen de la situación se remonta a hace casi diez años. La empresa entró en quiebra, y los trabajadores acudieron a la vía judicial para el cobro de cantidades: el Juzgado de lo Social número 3 de Lugo les dio la razón, y percibieron indemnizaciones, a razón de 25 días por año trabajado.

Sin embargo, todavía quedaba pendiente el cobro de mensualidades atrasadas, puesto que llevaban tiempo sin que se les pagase el sueldo. Para ello fue necesario acudir también a la vía judicial para conseguir el cobro por medio del Fondo de garantía social (Fogasa).

Cuando se tomó esa decisión, algo más de la mitad de la plantilla optó por encomendar las gestiones a UGT por medio de su asesoría jurídica, aunque luego una de las personas se desmarcó de esa postura. En aquel momento les podría haber correspondido a cada uno un máximo de 150 días, aunque solo llegaron a percibir 20. La razón está en que la demanda se presentó fuera de plazo.

Una sentencia dictada por el Juzgado de lo Social número 3 de Lugo en septiembre del 2007 establecía que los trabajadores tenían derecho a percibir, por medio del Fogasa, unas cantidades que oscilaban entre los 617,04 y los 761,28 euros, a las que había que sumar los intereses legales correspondientes.

Queda pendiente el cobro de 130 días, lo que supone una cifra total de 49.042,50 euros, repartida entre sumas diferentes: así, a alguno se le adeudan 4.010,50 euros, mientras que otro tiene pendiente 4.947,80.

Los once trabajadores en cuestión acordaron iniciar acciones, que se dirimirán en el Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo, porque aseguran que responsables de UGT reconocieron haber cometido sin haber hecho nada por corregirlo: la situación se planteó en varias reuniones en las que el sindicato, según explicaciones de ex empleados de la factoría, afirmó que las citadas cantidades llegarían a cobrarse, pero han pasado seis años desde el inicio.

En el escrito del abogado que los representa se subraya que en este asunto se ha producido un «daño material» por la existencia de ese impago. El grupo empresarial tenía otras fábricas en donde los empleados sí lograron cobrar todo lo correspondiente.

Los trabajadores llevan seis años esperando el cobro de cantidades