La Diputación alerta del impacto económico que tendría la modificación del trazado del Camino Norte

LUGO

Subraya que el itineario actual fue diseñado con rigor y sin generar alegaciones

01 nov 2013 . Actualizado a las 20:56 h.

Los diputados Regina Polín y Álvaro Santos entregaron en la sede lucense de la Xunta las alegaciones del organismo provincial contra la modificación del trazado del Camino Norte. El impacto en la actividad económica, la falta de respeto a la «lexitimidade histórica» y la amenaza a la seguridad de los peregrinos son las razones aducidas por la Diputación para defender el actual itinerario.

En cuanto al apartado económico, la Diputación subraya que entre Baamonde y el límite con la provincia de A Coruña funcionan unos 20 negocios cuya actividad depende directamente del Camino Norte y que la modificación del trazado los condena al cierre, «destruíndo emprego no rural e agravando a sangría demográfica». Respecto al rigor histórico, el organismo provincial, gobernado por el PSOE y por el BNG, sostiene que el trazado en la provincia quedó delimitado gracias a un trabajo diseñado y financiado por la Diputación a comienzos de los noventa, en la etapa en la que Francisco Cacharro presidía la corporación de San Marcos; destaca que el contenido de ese «rigoroso estudo» no solo fue asumido por la Xunta años después sino que se sometió a exposición pública sin recibir alegaciones. Por último, la Diputación cuestiona la seguridad del nuevo trazado propuesto por la Xunta en algunos tramos por carecer de señalización y por discurrir en algunos lugares por zonas que se inundan en períodos de intensas lluvias.

Múltiples alegaciones

La posible modificación del trazado ha generado polémica en algunos lugares. El caso más patente es el de Baamonde, en donde la idea de la Xunta, consistente en alejar la ruta hacia el este para llevarla por Pacios y pasarla bajo la vía del tren para que luego discurra hacia Bóveda, ha causado malestar vecinal, hasta el punto de que se colocaron pancartas y se organizó una manifestación. Los vecinos defienden el actual trazado, que discurre hacia San Alberte (Guitiriz) por el arcén de la N-VI, propuesta que también asumió como suya el Concello de Begonte en las alegaciones aprobadas ayer en un pleno extraordinario.

El Concello de Friol también alegó contra posibles modificaciones, defendiendo el actual trazado, y el alcalde, Antonio Muíña (PP), incluso criticó de manera clara y rotunda las intenciones de la Xunta.

Mañana, acto en Friol

Mientras tanto, los actos de rechazo se suceden. Para mañana, en la parroquia friolense de Miraz (albergue de peregrinos, cinco de la tarde), está previsto un acto, organizado por el colectivo Mulleres no Camiño y dirigido a analizar la importancia de la ruta jacobea como motor socioeconómico,