Una semana de protestas en Lugo que superan un año de Zapatero

Suso Varela Pérez
SUSO VARELA LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

OSCAR CELA

Las calles registran manifestaciones de hasta una docena de causas

13 may 2013 . Actualizado a las 07:11 h.

Los funcionarios de la Subdelegación del Gobierno ya lo dicen abiertamente, hay más peticiones de manifestaciones y de concentraciones en una semana que en todo un año del Gobierno de Zapatero. La crisis azota de lleno y numerosos colectivos han tomado las calles de la capital lucense en los últimos meses para hacer oír sus reivindicaciones. Se trata de protestas en la defensa de intereses educativos, sanitarios y laborales, todo ellos causados por los recortes.

En los tiempos de bonanza - especialmente en el primer tramo del mandato socialista, del 2004 al 2006- apenas se produjeron manifestaciones en la ciudad, y las que se registraron eran sobre derechos sociales y peticiones de mejoras en los servicios: la epidural, controles de armas, orgullo gay, funcionarios de prisiones, entre otras. Fue a partir del 2008 cuando comienzan de manera más persistente las protestas causadas por las crisis, siendo la huelga del transporte la más representativa, al ser el sector que primero mostró las consecuencias de lo que vendría después. Ese mismo año hubo duras protestas por los precios de la leche, el conflicto de la limpieza en la Diputación o las ambulancias.

Ahora, los tiempos han cambiado, y en las calles de Lugo se pueden ver todas las semanas hasta una docena de causas abiertas: la comunidad educativa de As Mercedes contra la supresión del instituto, los trabajadores de Alimentos Lácteos, las protestas por el posible cambio de la ley de educación, los afectados por las preferentes, los empleados de Sequor, los trabajadores de la Cámara que llevan siete nóminas sin cobrar, los integrantes del movimiento 15-M, la organización para el 6 de junio de una marcha para demandar los nuevos servicios del HULA, el movimiento Stop Desahucios, el regreso de las movilizaciones de vecinos y comerciantes de la Residencia para pedir la apertura del Xeral y hasta la petición de que se investigue el crimen de O Ceao.