No quedó ni un alma en Friolfe; todos fueron a la Audiencia para apoyar a Benjamín

La Voz

LUGO

20 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Ayer, una parte de la parroquia de Friolfe quedó deshabitada porque sus moradores vinieron en masa a la Audiencia Provincial de Lugo para apoyar y defender al «abuelo coraje». El abogado que defiende a Benjamín Santas, citó a más de una veintena de parroquianos como testigos. No hubo uno que no destacase la violencia de O Bruzos que, con su comportamiento, los tenía atemorizados. «A un animal deses tíñamoslle medo», aseguraron. Muchos de ellos justificaron la reacción de Benjamín «porque unha casa ou unha aira son moi sagradas; ¡Como para ir meterse a elas!». «Tiñamos problemas con él nas festas, nas pistas, nos prados, por riba das cancelas...», explicó otro de los que se desplazaron a Lugo. Fue tanta la concurrencia y la expectación que despertó el juicio que no hubo sitio en la sala de vistas. Como no dejaban estar de pie, hubo quien hizo turnos para poder seguir algunos momentos del juicio.

Varios vecinos elogiaron y destacaron el valor de Benjamín. Aseguraron que, a sus 81 años, estaba sacando su casa adelante; recordaron que la familia quedó deshecha por el suceso. «Pero el está tirando por todos para sair adiante», apuntaron. Durante la celebración del juicio prestaron los guardias civiles que no pudieron confirmar, salvo uno de ellos, si la puerta de la casa fue forzada o no. Intervino también el instructor de las diligencias el cabo en la reserva Armando Lorenzo Fernández que, en su momento, fue detenido en el marco de la operación Carioca que sigue en fase de investigación en el Juzgado de Instrucción número 1 por la jueza Pilar de Lara.

En octubre de 1988 cuando tenía veintitantos años, un hombre que ahora es médico, fue atacado por O Bruzos en una discoteca de Sarria. Le rajó la cara y el abdomen. «Es algo que no olvidaré», dijo el agredido. «El resultado del juicio fue una tomadura de pelo. Si lo hubieran juzgado de otra manera, igual no pasó lo que pasó», dijo. A O Bruzos lo condenaron por una falta.