El Guggenheim chairego solo abre dos horas de lunes a viernes

Xosé María Palacios Muruais
xosé maría palacios VILALBA / LA VOZ

LUGO

PALACIOS

Las instalaciones aún carecen de equipamiento en algunas salas

19 may 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La Casa da Cultura de Castro de Ribeiras de Lea luce imponente por fuera, pero queda bastante vacía por dentro. Las instalaciones tienen un horario que parece inversamente proporcional a sus capacidades. Solo dos horas al día, de lunes a viernes, está abierto el edificio, que acoge la biblioteca municipal. Esas dos horas son las que abre la biblioteca, trasladada a ese lugar hace pocos años y ubicada ahora en la planta baja.

La luminosidad de las dos plantas del edificio hacen pensar que quizá el gasto en alumbrado no sea el que ocupe más fondos. Observando el entorno desde la parte que da al sur, se aprecia una expansión que dotó a Castro de Ribeiras de Lea de más servicios y de nuevos edificios. Poco más hay que observar en esas dos plantas, en las que aún falta mobiliario que llene las dependencias y facilite nuevos usos.

Viendo el edificio desde la avenida da Terra Chá, casi parece inevitable pensar en el Guggenheim bilbaíno. Por ahora, de todos modos, poco ha servido para un despegue socioeconómico en una villa cuyo crecimiento en las últimas décadas es innegable.

Tras vicisitudes que retrasaron las obras, cuyo presupuesto rebasó ampliamente el millón de euros, la obtención de fondos para mobiliario constituyó un objetivo cuyos flecos aún no se han cerrado del todo: hace varias semanas, el área de Cultura de la Diputación anunció una aportación de unos 50.000 euros para ese fin. El alcalde, Francisco Balado, dice que la idea del Concello es ampliar el horario, pero aún no hay planes concretos.

Hay también clases de teatro varios días a la semana, pero solo la contemplación del salón de actos basta para imaginar la actividad que podría ofrecer un edificio comparable al museo de las orillas del Nervión por la innovación que representa. Pero aunque está lejos de una ría, este parece haber encallado en el pantanoso terreno chairego.