Inasequible al desaliento, el socialista José Blanco, ministro de Fomento y candidato por Lugo, abre nuevas expectativas para el aeródromo de Rozas después del fiasco que resultó el intento de crear en dichas instalaciones un centro de reciclaje de aviones. El compromiso adquirido por Blanco de convertir Rozas, si en la próxima legislatura gobiernan los socialistas, en un centro de referencia de sistemas aéreos no tripulados ha sido acogido con muy desigual interés (incluidas interpretaciones humorísticas) en distintos ámbitos sociales.
Como había anunciado el propio Blanco el jueves, el PSOE amplió ayer la información sobre dicha propuesta. En el comunicado difundido por los socialistas se señala, entre otras cosas: «O de Sistemas Aéreos non Tripulados é o segmento da aviación con máis potencial de crecemento, tanto desde o punto de vista da seguridade como na vixilancia de incendios forestais, inspección de tendidos eléctricos, seguimento de especies naturais ou vixilancia e control de colleitas». Además del citado perfil, el PSOE cree que Rozas ofrece buenas condiciones para promoverlo como centro de prácticas para distintas actividades aeronáuticas.
El PSOE señala: «Buscarase potenciar o aeródromo para a práctica de actividades con avións instrumentados, aeróstatos para experimentación científica, ensaios de compatibilidade electromagnética e divulgación científica».
El aeródromo lucense es también apto, según el PSOE, para que el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial desarrolle campañas científicas en el norte de España con aviones instrumentados. Igualmente, los socialistas entienden que reúne condiciones para realizar ensayos de compatibilidad electromagnética.
La propuesta para Rozas es una de las diez que se compromete a ejecutar Blanco si los socialistas vuelven a gobernar España. Son propuestas, como dijo el candidato, para «tierra, mar y aire».