Balado, sorprendido por su victoria mientras Valiño medita su futuro

vilalba / la voz

LUGO

24 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El alza del PP en Castro de Rei le ha dado una holgada mayoría absoluta que parece haber supuesto una gran sorpresa. Al margen de cábalas y de comentarios, hasta el candidato popular y futuro alcalde, Francisco Balado, reconoció ayer el aumento de votos había resultado superior a las previsiones: «Foi inesperado», dijo ayer.

Tras ocupar el tercer lugar en el 2007, detrás de Arturo Pereiro y de José Ónega, y de ejercer como portavoz municipal en la oposición en este mandato, el cabeza de lista popular tiene como respaldo un notable caudal político: el PP no solo subió dos concejales, pasando de seis a ocho, sino que el domingo logró casi 400 votos más que en el 2007. Ese gran aumento dejó sin efecto el resultado del PSOE, que conservó sus cuatro representantes ganando 147 votos, y coincide con el retroceso del BNG, que baja de uno a dos ediles. En cualquier caso, Balado admitió ayer que el número de concejales y de votos logrados no entraba en los planes trazados: «Pensabamos nunha maioría axustada no mellor dos casos», afirmó.

Como otros candidatos del PP, Balado manifestó que los resultados eran el fruto de un trabajo colectivo y la expresión de cierto hartazgo ciudadano, aunque sin dejar de reconocer la posible influencia de otras causas: «A xente está un pouco cansa dos gobernos bipartitos e tripartitos, pero non creo que haxa un só factor», resaltó.

La marcha de Roberto Lorenzo, elegido finalmente como edil por TEGA, privó a los populares de la mayoría absoluta en Castro de Rei en el 2007. El concejal volvió al PP, y ocupó el segundo lugar de la lista, detrás de Balado, tras haber formado parte del gobierno de Díaz Valiño. Sin embargo, los votos logrados por el PP anteayer (1.938) son algo menos que la suma de los que populares y Terra Galega consiguieron por separado hace cuatro años (2.078).

Mientras tanto, Juan José Díaz Valiño, tras darle la alcaldía al PSOE hace cuatro años, reconocía ayer que estaba «decepcionado»: «Paréceme incrible», dijo, no sin agregar que el resultado le parecía «inxusto». La impresión por el resultado llevó al actual alcalde a mostrar sus dudas sobre su futuro en la corporación que tomará posesión el mes próximo: «Xa o veremos. A ver...», declaró al tiempo que se mostraba dispuesto a abrir un tiempo de reflexión. Ni siquiera aseguró que tomase posesión como concejal.

De todos modos, sí se mostró dispuesto a facilitar a su sucesor en la alcaldía el traspaso de poderes y a informarlo de asuntos del Concello.