La celebración de San Xiao sirvió de nuevo ayer como marco para que las ciudades hermanas de Ferrol y Lugo reivindicasen las infraestructuras de conexión que puedan abrir nuevos salidas desde el eje norte gallego. Así lo expresaba ayer el regidor local, Vicente Irisarri, que señaló que «Lugo, Mondoñedo e Ferrol deben loitar conxuntamente por que pronto se complete a Transcantábrica que una Galicia con Europa». La cita anual de ayer en el teatro Jofre fue la primera desde que se abrió la totalidad del trazado Ferrol-Vilalba de la autovía AG-64, una efeméride que no pasó desapercibida. «Unha vía de comunicación moi importante para Ferrol, Vilalba, As Pontes e Lugo», precisó el alcalde lucense, José López Orozco, «un eixo económico vertebrador de desenvolvemento e acercamento para que os nosos cidadáns vivan en mellores condicións». Para Irisarri, «debemos celebrar» su puesta en servicio después de más una década en obras que «está facilitando as relacións entre Ferrol e Lugo».
Ambas ciudades estrecharon ayer los lazos que las unen oficialmente desde el año 2000 y de forma oficiosa desde hace más de un siglo. Y la conexión entre ambas quedó patente en la demanda lucense de la declaración de Patrimonio de la Humanidad para la ciudad naval. «Lugo estará con Ferrol ata que se cumpra o desexo de que esta marabillosa ría sexa patrimonio da humanidade. Non me dirán vostedes que non sería marabilloso abrir ese triángulo que forman Santiago, a muralla de Lugo e o faro de A Coruña a un cuadrilátero onde estea Ferrol. ¿Quen vai perder? Ninguén. ¿Quen vai gañar? Todos», aseguró Orozco.
Un «escaparate»
Hubo recuerdo también para la crisis económica. «O importante neste momento é xerar emprego e confianza», manifestó el regidor lucense. «Nun momento de incertidume», señaló, «Ferrol segue sendo un escaparate no que se miran moitos países e moitas industrias». Y en este sentido destacó el ejemplo de colaboración entre Ferrol y Lugo «por riba dos intereses localistas».
Ninguno de los regidores se resistió a presumir de su gestión: Irisarri destacó los presupuestos participativos como «expresión e exercizo de democracia real e participativa» y de que «o futuro o deseñan día a día os cidadáns». Y López Orozco recordó el acuerdo alcanzado hace unas semanas con el PP local para sacar adelante el plan xeral de ordenación municipal.
Pero los protagonistas ayer eran otros. El primero, la Asociación Ferrolá de Drogodependencias Asfedro, que recibió el galardón de Ferrolán do Ano, por sus 25 años de labor desinteresada. Y también la Sociedad Filarmónica Ferrolana, el historiador Alfredo Vigo Trasancos y la veterinaria Rebeca Atencia, que recibieron la insignia de oro y elogios municipales locales y foráneos. «Os de Lugo vemos con envexa estes recoñecementos. (...) ¡Que marabilloso ten que ser unha cidade con persoas como estas!», exclamó el alcalde de la ciudad de las murallas.
Del gobierno lucense se quedaron sin viajar a Ferrol la delegada de Urbanismo y el responsable de Medio Ambiente, Lino González; este se quedó en Lugo ante la posibilidad de que se produjesen incidencias debido a la abundante lluvía que caía.