El actor, que pasa unos días en la villa, entiende el éxito de Luis Tosar cuando vuelve a Galicia y siente el cariño de sus gentes
19 ago 2010 . Actualizado a las 02:00 h.El verano trae de vuelta a Galicia a un buen número de hijos de emigrantes. Entre ellos, es habitual ver a célebres personajes que abandonan unos días Madrid para visitar estas tierras. Tristán Ulloa es uno de ellos. Estos días se encuentra en Fondevila de Suar, en Antas de Ulla. La aldea le vio crecer durante su juventud y hoy recuerda con cierta nostalgia aquellos días. Mira fotos y pregunta por sus compañeros de aventuras.
Este conocido actor, director y guionista con raíces gallegas revive ahora momentos de su niñez en casa de su tía Sara, rodeado de su familia.
-¿Qué le trae de nuevo a Galicia?
-Mi familia por parte de padre es toda de aquí. Es un buen motivo para venir. También me apetecía que mi hijo conociera una parte muy importante de sus orígenes. Los buenos momentos de mi infancia y mi adolescencia los viví aquí.
-¿Qué recuerdos tiene de sus vacaciones en Fondevila?
-Es una aldea con tres casas y en todas había niños. Cuando estaba con ellos hacíamos excursiones o jugábamos al fútbol contra los de Suar. Era un ambiente que para los niños de ciudad que veníamos de Madrid, Vigo, Barcelona o San Sebastián se convertía en una gran experiencia. Muchos no conocíamos el campo o creíamos que la leche venía del supermercado. Yo agradezco haber crecido con esta parte, te hace apreciar cosas más sencillas en la vida.
-¿Todo esto influyó en su carrera ?
-Influyó como persona, yo creo que como profesión es otra cosa, es algo a lo que te dedicas. Si hubiese sido arquitecto sería igual. Te afecta en tu proceso de crecimiento, desarrollarte y saber estar a la altura de todas las circunstancias. Por ejemplo, en mi profesión ayuda a estar en un estreno, alfombra roja, goyas y en otros sitios. Lo que importa son las personas, hay que tener una toma de tierra, tu familia, tus amigos, esto te acerca a la realidad cotidiana. En esta profesión es todo tan de mentira que no hay que creerse ni lo muy bueno ni lo muy malo. Tengo aquí la misma gente que conozco desde que tenía doce años. Yo me encuentro con Luis Tosar en Galicia y me doy cuenta de que es lo que es gracias a lo que le rodea.
-¿Cuáles fueron sus primeros pasos en la interpretación?
-Lo mío fue algo entre accidental y circunstancial. Empecé en el colegio, el instituto y luego en la universidad. Después hice teatro de principiante en salas pequeñas de Madrid. Una cosa te lleva a otra. Yo empece en esto sobre todo como una terapia, poco a poco el teatro me ayudó mucho a desarrollarme personalmente y encontrar una profesión.
-¿Cuándo decidió dar el paso?
-Estaba estudiando empresariales y decidí que quería hacer esto. Me presenté a las pruebas de la RESAD y las pasé. Luego, al mismo tiempo que estudiaba, empecé a trabajar y a hacer mis pinitos en obras de teatro y películas. Al final, el trabajo llama al trabajo.
-Después de las nominaciones a los Goya, ¿ve próximo alcanzar el premio?
-Ser el eterno nominado no es una de las cosas que más me preocupen. Para mí el mejor premio es tener un trabajo. Es difícil vivir de esto y hacerlo ya es un privilegio.
-¿Qué opinión tiene del teatro y el cine dentro de la sociedad gallega?
-Vivo en Madrid y me resulta difícil seguir la idiosincrasia gallega. De todas formas, intento interesarme por lo que se va haciendo. Yo he trabajado varias veces en Galicia haciendo películas. Tengo buenos compañeros, entre ellos Víctor Mosqueira, Morris, María Vázquez, Luis Tosar, Manquiña o Nacho Novo. Este último fue el protagonista de la película Pudor de la que fui director con mi hermano David. De lo que no hay duda es de que aquí hay grandes equipos técnicos. Sin ir más lejos, del equipo de Gran Reserva el 80% es gallego.
-¿Conoce el festival de teatro de Ribadavia o el de Cans?
-Todavía no he estado en el festival de teatro de Ribadavia, pero tengo muchas ganas de ir. El de Cans O agroglamur ya lo he visitado. Fui porque me hablaron muy bien de él Manquiña, Tosar y Anton Reixa. La verdad es que me lo pasé muy bien. Entre lo que más me sorprendió estuvo el concierto de Tony Lombao.
-¿Como se siente más cómodo, de director, actor o cineasta?
-Tanto dirigir, escribir o interpretar son tres formas complementarias de hacer lo mismo. Lo que haces es contar historias desde tres puntos de vista distintos. Una completa a la otra. Entre ellas interactúan y se retroalimentan.
-¿En qué proyectos está trabajando?
-Nos pondremos a trabajar en la segunda temporada de Gran Reserva y estoy escribiendo mi segundo largometraje.