Las empresas que trabajan en la A-54 están a la espera de que en esta reprogramación se incluyan partidas para continuar los trabajos, sino se verán abocadas al cierre total para 2010, como sucede en el caso del tramo Vilamoure-Monte de Meda. Podría haber una solución de urgencia, como los 9 millones que anunció Blanco para que sigan los trabajos este año en la Autovía del Cantábrico. La A-54, salvo el trazado entre Palas y Arzúa, estaba previsto que acabase a finales del 2012.