Una orden interna de medidas provisionales manda hacer la prueba de alcohol solo a quien se le vean síntomas
30 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Por si los guardias civiles del Tráfico dudaban de la gravedad de la crisis, el Ministerio del Interior les acaba de enviar una circular interna y reservada que deja a los motoristas y a sus jefes de una pieza, y dudando de si se podrá mantener la seguridad en las carreteras con un recorte de tal calibre. Para empezar, la orden transitoria acaba en la práctica con los controles preventivos de alcoholemia. Pocos conductores se encontrarán ya en la carretera con los encomiables equipos de tráfico que hacen controles sistemáticos de alcoholemia. La orden dice tajantemente que hay que reducir el número total de pruebas (cada boquilla desechable cuesta unos 15 céntimos), y que para ello se hagan las pruebas a quienes presenten síntomas de conducir bajo los efectos del alcohol «y de forma selectiva a los demás conductores, a efectos de reducir el número total de pruebas».
Pero además, en cuanto a las operaciones extraordinarias de este año, la orden dice que se pongan los efectivos «estrictamente indispensables tanto de personal como de material en la Operación Verano, la Vuelta Ciclista a Andalucía, el campeonato de motociclismo de Jerez, Romería Virgen de la Cabeza y Virgen del Rocío».
Pero donde los recortes son más abundantes es en los servicios de vigilancia en carretera. Aquí, la orden pide a los guardias que circulen más despacio que la media de los vehículos, y que faciliten ser adelantados. Y para que el consumo de combustible baje aún más, la Dirección General de la Guardia Civil les pide que pongan en práctica las técnicas de conducción económica. Cita textualmente la orden: «ventanillas cerradas, evitar frenazos bruscos, vigilancia de la presión de los neumáticos, apagar el motor durante los estacionamientos, reducir en lo posible los kilómetros a recorrer en los vehículos oficiales». Pero además, les pide que recorran el tramo a vigilar solo una vez, y luego aparquen siempre que puedan el vehículo en los lugares conflictivos y tramos de concentración de accidentes.
Otro de los párrafos de la orden, de aplicación en toda España, pide que se utilicen preferentemente los turismos de cuatro ruedas y se disminuya el uso de todoterrenos y motocicletas, porque consumen más.