Aunque pueda parecer lo contrario, la actriz Angelina Jolie no estuvo en RadioVoz, pero sí su doble oficial en España, Francesca Vegas. En esta ocasión Brad Pitt no fue su acompañante, sino los actores protagonistas del nuevo cortometraje del cineasta sarriano Roberto Lolo.
Su rodaje comenzó en la tarde de ayer y continuará hasta mañana domingo, con un buen elenco de actores que tuvieron la deferencia de hacer parada en los estudios de RadioVoz Lugo. Lara de Miguel, Sergio Hurtado, Francesca Vegas y Roberto Lolo compartieron sus impresiones sobre el proyecto del cineasta sarriano.
Los protagonistas del cortometraje no quisieron romper la magia del guión, ya que según los actores es «mágico». Tanto es así que Roberto Lolo lo calificó como «el mejor guión de mi vida».
Los actores y el director fueron sorprendidos por el temporal de nieve que azotó la provincia lucense, aunque finalmente llegaron sanos y salvos a los estudios y con una bonita historia para poder plasmar quizás en otro cortometraje de Roberto Lolo. A su llegada a Lugo, en la avenida de Madrid, el vehículo que conducía Roberto dijo basta, y se negó a seguir rodando con el asfalto helado. Todo se solucionó gracias a la inestimable ayuda de Sergio Hurtado, que muy amablemente, ante la atenta mirada de sus compañeras de reparto, empujó el utilitario hasta que este se puso en marcha.
Después de la entrevista y la sesión fotográfica a la que fueron sometidos -por cierto, se nota la profesionalidad en los posados al enfrentarse al objetivo de la cámara-, los invitados compartieron anécdotas y confidencias con el locutor Juan Alonso en una cafetería cercana. Hablaron del panorama cinematográfico actual y de las escasas ayudas que conceden las instituciones a los creadores de cortometrajes, considerados la cantera del cine español. Además de una buena ración de grata conversación, quedó patente la proximidad y la afabilidad de estos personajes del mundillo televisivo y cinematográfico nacional.
Ante el panorama que se les presentó para hacer el camino de ida, pensaban en cómo sería la vuelta, bromeando incluso en que podría ser «catastrófica».