La Xunta publica un estudio sobre la historia de pozos y fuentes de Lugo

LUGO

19 jul 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Los asentamientos humanos han estado vinculados a lo largo del tiempo a la existencia de agua. Adolfo de Abel Vilela ha investigado la historia de las fuentes y pozos de Lugo, en un amplio y bien presentado trabajo que, bajo el título A fonte da Porta Miñá e o pazo de Orbán. Proyecto de Rehabilitación, firma junto a los arquitectos Alberte González Rodríguez y Jorge Salvador Fernández. La edición ha corrido a cargo de la Sociedade de Xestión do Plan Xacobeo. «Na cidade de Lugo non temos noticia da existencia de fontes no interior do recinto amurallado na Idade Media, pero si de pozos. Con todo é posible que en época romana houbese algunha fonte pública, ao contar con acueduto», aclara Abel Vilela.

En la citada publicación de la Xunta se ofrecen algunas características del acueducto que en época romana abastecía a la ciudad (en el siglo XVIII mandó construir otro el obispo Izquierdo). El citado historiador recuerda que las excavaciones arqueológicas han dejado al descubierto vestigios de pozos romanos. Del período comprendido entre los siglos XII y XVIII, se reseñan algunos públicos y otros privados. Entre los de carácter público aparecen citados el de O Carballal (entre lo que hoy es la plaza de Ferrol y el inicido de Amor Meilán) y el de As Cortiñas de San Román (la actual Praza Maior), lugares en los que se celebraba mercado o feria mensual en la baja Edad Media. Igualmente, cita los de Pedro Muceiro, en la calle de la Cruz, el de A Pinguela (que abastecía a los vecinos de la plaza do Campo) y el de la Porta Miñá, posteriormente transformado en fuente, que ahora se recupera junto al hotel del pazo de Orbán.

Praza Maior

En las Cortiñas de San Román (lo que hoy es la plaza Maior) se menciona en 1466, dice el investigador, un pozo en unas casas pegadas a lo que entonces era el seminario de San Lourenzo. Era poco profundo y estaba seco gran parte del año.

Otro pozo público, del que sólo existe referencia documental, es el que estaba en lo que hoy es la plaza de A Soedade; hay documentación (junio de 1602) de la orden municipal para limpiarlo conveniente y que estuviera en buenas condiciones.