Once municipios de la provincia tendrán que hacer un plan de actuación frente a riesgos sísmicos
LUGO
Once municipios gallegos, todos de la provincia de Lugo, tendrán que realizar un plan de actuación municipal frente a riesgos sísmicos, al ser considerados especialmente sensibles a sufrir terremotos. Se trata de los municipios de As Nogais, Baralla, Becerreá, Láncara, Samos, Sarria, Triacastela, Navia de Suarna, Negueira de Muñiz, Negueira de Piquín y el mariñano de Ourol.
Así se recoge en el Primer Plan Especial fronte ao Risco Sísmico en Galicia (Sismigal), un documento de más de 600 páginas, y que fue aprobado en el Consello de la Xunta la pasada semana. Si bien el presidente en funciones, Emilio Pérez Touriño manifestó que los terremotos no son «intensos, ni especialmente problemáticos en Galicia», argumentó la conveniencia de contar con este plan porque, entre otros aspectos, recoge los distintos grados de vulnerabilidad de los edificios y otras construcciones en caso de producirse un movimiento sísmico.
Estudio pormenorizado
El plan contiene un estudio pormenorizado e individualizado de cada municipio, y en algún caso incluso parroquias, y contiene diferentes anexos, como una base de datos sobre medios e infraestructuras que pueden ser utilizadas o movilizadas, como hospitales, centros educativos o equipos de campaña y parques de bomberos, en caso de terremoto.
Incluye también un inventario de localidades, carreteras, tendidos eléctricos y otros elementos sensibles de resultar afectados, para conocer de forma detallada los posibles efectos para la población. Un simulador de escenarios sísmicos permitirá prever las consecuencias de un terremoto para planificar la respuesta más eficaz.
La última gran sacudida fue en 1997, con epicentro en la comarca de Sarria, y que alcanzó el 5,3 en la escala Ritcher.