La carretera N-VI tiene dos puntos peligrosos a la altura del municipio de Baralla, según denunció el BNG. Están situados en la incorporación de la carretera de Costantín y en el cruce de la pista de Pacios. En consecuencia, este grupo pidió que el alcalde, Manuel González Capón, informe de la situación de las obras de mejora que están previstas en ambos enclaves.
El portavoz nacionalista en la corporación local, Xosé Manuel Becerra, recordó que el pleno aprobó una moción de su grupo proponiendo solicitar a Fomento que habilite un carril de incorporación en Constantín. El edil afirmó que «é hora de que se empecen a ver as xestións feitas pola alcaldía». El concejal del concejal recordó que los propios vecinos denunciaron en reiteradas ocasiones la peligrosidad del enlace, ya que ni siquiera el autobús escolar puede pasar a recoger a los niños.
El BNG propone que en el cruce de la pista de Pacios sea colocado un espejo. A pesar de ser obras de poca envergadura, llevan meses de demora debido, según Becerra, al desinterés del alcalde.