Un informe técnico pone de manifiesto numerosas deficiencias en la red y la necesidad de automatización Actualmente el 87% de los consumidores no beben de la traída
23 sep 2004 . Actualizado a las 07:00 h.?l gobierno local está decidido a crear una empresa mixta, bajo la forma de sociedad anónima, para la gestión de todo el ciclo de agua en la capital lucense. Así lo aseguraron ayer el alcalde, José López Orozco, y su delegado para Medio Ambiente, Lino González Dopeso, en la presentación del estudio técnico encargado para conocer el estado de las infraestructuras de suministro de agua y saneamiento y las medidas que deben ser adoptadas. El alcalde afirmó que, mientras sea el presidente de la corporación municipal, el servicio de aguas no será privatizado. La empresa que se proyecta tendrá mayoría de capital municipal. A la vista del completo trabajo técnico, encargado a una empresa privada y efectuado bajo supervisión de los técnicos municipales, y con la información recabada anteriormente en otros ámbitos (Confederación Hidrográfica y servicios del Concello), el gobierno local está convencido de que el Miño puede aportar en cantidad y calidad el agua que necesita Lugo. Con la gestión a través de una empresa mixta -destacó Orozco- los beneficios se reinvertirán en la mejora del servicio. El informe técnico incluye una, al parecer, muy completa encuesta ente los usuarios del abastecimiento de agua. Según indicaron Orozco y González, el 87% no bebe el agua que sale de los grifos porque no se fían de su calidad. En el estudio, se señalan las zonas de la ciudad según el grado de satisfacción o insatisfacción de los consumidores. Al parecer, en general coinciden los puntos en los que la opinión es peor con aquellos en las que la red de distribución está en peor estado. En el citado estudio se indica que es necesario establecer sistemas de protección frente a posibles elementos contaminantes. Según los autores del informe, la capacidad de almacenamiento total de agua tratada en la planta es de 1.650 metros cúbicos, y el actual sistema impide la optimización de la elevación, así como el funcionamiento de la planta potabilizadora a caudal constante durante el día. Es necesario -señalan- instalar caudalímetros en las tuberías de impulsión, de modo que sea posible registrar los datos correspondientes a cada día.