
El futbolista soberino Pablo Pérez fue uno de los protagonistas de la selección gallega de fútbol sub-16 en el campeonato por autonomías que se acaba de disputar en tierras gaditanas. El combinado autonómico conquistó su clasificación para la fase final, que se jugará en abril.
Galicia empató (2-2) con el combinado de Aragón y con Asturias (1-1), y le endosó un contundente 11-0 a Melilla. Estos resultados le dieron el pasaporte para esta fase final.
Pablo muestra su satisfacción por el hecho de haber tenido protagonismo en el equipo gallego. Fue titular en los dos primeros partidos, y en el tercero salió desde el banquillo. «Estoy muy contento de haber representado a Galicia. Estar en un campeonato de estas características es una motivación, un aprendizaje y un escaparate perfecto, porque ahí están muchos ojeadores de grandes clubes», señala el futbolista soberino.
Con la selección gallega, Pablo jugó de central, una posición que ya es habitual desde que fichó el pasado verano por el Real Club Celta. La joven promesa de 16 años espera estar con Galicia en la última fase.
Un paso adelante
El pasado verano, Pablo Pérez, dio un salto importante en su carrera. El jugador, que se formó en el Calasancio y pasó por el Pabellón, estampaba su firma por el Real Club Celta.
La experiencia le está resultando fructífera, ya que hasta el momento ha sido titular en todos los partidos que ha disputado su equipo. «Estoy muy contento. Aquí hay más nivel, es más entretenido y se está mucho más en contacto con la pelota. Hay mucha más competitividad y se disfruta más. De verdad, estoy muy motivado», afirma el jugador soberino.
Pablo Pérez forma parte del equipo cadete del Celta que compite en la División de Honor. «Estamos en el segundo puesto, a seis puntos del Dépor, porque empatamos algunos partidos, que nos penalizaron. El objetivo es ganar la liga, y considero que podemos hacerlo. Las próximas jornadas serán claves», asegura.
El futbolista de Sober se entrena en la Ciudad Deportiva de A Madroa y en este escenario disputa los partidos su equipo. Hace unos días, el plantel recibió la visita de Gabri Veiga, un ejemplo para la cantera celeste. «Mi objetivo y mi sueño sería debutar algún día en Balaídos con el primer equipo del Celta», concluye el joven jugador soberino.