El mundo rural romano lucense va ganando visibilidad

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

SOBER

Los recientes hallazgos arqueológicos en Sober y Castro de Rei abren nuevos caminos en un terreno todavía muy poco explorado

19 oct 2020 . Actualizado a las 23:30 h.

En medio de las dificultades causadas por la crisis sanitaria, en los últimos meses se han dado dos importantes pasos en la investigación del patrimonio arqueológico romano de la provincia. El más reciente es el hallazgo en la parroquia de Proendos -en el municipio de Sober- de los vestigios de una villa romana, es decir, una residencia noble vinculada a una explotación agrícola. Durante la primera quincena de este mes, la Consellería de Cultura promovió en este yacimiento una serie de sondeos arqueológicos que se espera que continúen la próxima primavera. Por otro lado, el pasado julio se dio a conocer el hallazgo de otro asentamiento de este tipo en la parroquia de Coea, en el municipio de Castro de Rei, donde también se han efectuado catas arqueológicas.

Las intervenciones en estos yacimientos son por ahora algo sumamente infrecuente en la provincia, según explica el arqueólogo Francisco Alonso Toucido, director técnico de los sondeos de Proendos. «Aparte dos casos de Sober e Castro de Rei, nos últimos anos non se fixo ningunha outra escavación nas vilas romanas lucenses», señala.

Asentamientos rurales

En el territorio provincial, no obstante, se conoce la existencia de diversos asentamientos rurales de la época romana. En un trabajo publicado en 1982, la arqueóloga María de la Cruz Fernández Castro indicó la presencia de nueve yacimientos de esta clase en los municipios de Abadín, Chantada, Lugo, Pantón, Pol, Quiroga, Sober, Vilalba y Xermade. Desde entonces han aparecido otros. Uno de los más recientes se descubrió en el 2017 en el municipio de As Nogais. Sin embargo, en la mayoría de los casos se trata de hallazgos casuales de ciertos elementos -como pedazos de columnas, ladrillos, tejas o piezas de cerámica, entre otros- que indican la presencia de construcciones importantes, sin que se llevasen a cabo sondeos o excavaciones.

Alonso señala que otros hallazgos relacionados con villas romanas pueden haber pasado totalmente desapercibidos para la población. «Hai casos nos que se encontran restos de maneira fortuíta ou en prospeccións arqueolóxicas previas á realización de obras públicas ou privadas, pero eses achados non se publican e o único que se fai é incluílos no catálogo da Dirección Xeral de Patrimonio Cultural», comenta. «No que respecta á investigación das vilas romanas lucenses está practicamente todo por facer», agrega.

Un caso poco común

Una excepción en la carencia general de excavaciones de estos yacimientos está en la parroquia de San Vicente de Castillón -en el municipio de Pantón-, donde el arqueólogo Felipe Arias realizó algunos sondeos a principios de la década de 1980. En el lugar aparecieron vestigios de mosaicos y de un hipocausto o sistema de calefacción, unos elementos que también se han encontrado en muchas villas romanas, como la de Proendos. Pero desde entonces no se realizaron más investigaciones en este lugar y Alonso apunta que no está claro que este yacimiento consista en una villa romana. «Pode ser un aglomerado secundario de poboación bastante importante, non unha facenda rural, e para despexar as dúbidas habería que facer máis escavacións», comenta.

Donde sí se ha realizado una investigación intensa en tiempos recientes es en la residencia romana de la Domus do Mitreo, en la capital provincial. Pero en este caso se trata de algo muy diferente a una villa, señala Francisco Alonso. «É unha casa nobre de grandes dimensións, como as vilas, pero encóntrase dentro da antiga urbe lucense, nun ámbito totalmente urbano e non rural», apunta. «As vilas eran centros administrativos de explotacións agrarias e articulaban territorialmente o seu entorno, algo que non sucede coa Domus do Mitreo, que forma parte do entramado urbano», apostilla.

Por otro lado, Alonso apunta que «ata agora, a atención ao mundo romano na provincia de Lugo centrouse sobre todo na propia capital, debido á gran importancia que ten o patrimonio arqueolóxico de Lucus Augusti, pero o rural tamén ten moito que dicir neste terreo».