Un restauración paralizada en los murales de Pinol

Francisco Albo
francisco albo MONFORTE / LA VOZ

SOBER

Un aspecto de la restauración de las pinturas murales de la iglesia de Pinol, que ha quedado interrumpida a causa de la alarma sanitaria
Un aspecto de la restauración de las pinturas murales de la iglesia de Pinol, que ha quedado interrumpida a causa de la alarma sanitaria CEDIDA

A la rehabilitación del conjunto de pinturas Sober, iniciada en octubre, le faltaba un mes y medio para acabar

04 abr 2020 . Actualizado a las 11:11 h.

La interrupción de todos los trabajos no considerados como esenciales debido a la situación de alarma sanitaria ha detenido tres proyectos de rehabilitación del patrimonio histórico de la Ribeira Sacra que estaban actualmente en marcha. Uno de ellos, que ya se encontraba en una fase muy avanzada, consiste en la restauración de los murales renacentistas de la iglesia de San Vicente de Pinol, en el municipio de Sober. Los trabajos, financiados por la Consellería de Cultura, corren a cargo de la empresa especializada Babelia. Los cuatro miembros del equipo de restauradores que se ocupa de este importante conjunto pictórico cesaron el pasado lunes una prolongada labor que iniciaron el pasado octubre.

Según explica Montserrat Jiménez, una de las restauradoras, «el trabajo estaba yendo estupendamente hasta que hubo que parar y lo que faltaba por hacer puede llevar en torno a un mes y medio». Los técnicos ya retiraron las capas de cal que cubrían desde hace siglos todas las pinturas conservadas en los muros interiores de la iglesia, con la excepción de dos escenas completas de la Pasión de Cristo. «Es un conjunto muy significativo y se conserva todo su programa iconográfico», señala la restauradora. También estaba terminado el proceso de consolidación de aquellas partes de las capas de mortero -que sirven de soporte a las pinturas- que corrían peligro de desprenderse. Un 60% del total de los murales ya estaba además en proceso de limpieza.

Labores pendientes

Los trabajos que están pendientes de realizar para completar la restauración de este conjunto de murales, según apunta por otro lado Montserrat Jiménez, «afectan sobre todo al aspecto estético de las pinturas, como la recuperación de la luminosidad y el cromatismo». La empresa que lleva a cabo la restauración, por otra parte, creó hace algún tiempo un blog para divulgar este trabajo, que puede verse en la dirección pinturamuralsanvicentepinol.blogspot.com. «El blog lo teníamos algo parado, pero pensamos aprovechar el período de confinamiento para actualizarlo y explicar con más detalle lo que hemos estado haciendo durante los últimos meses», dicen.

La iglesia de Pinol, de estilo románico del siglo XIII, formó parte de los dominios del monasterio ourensano de Santa Cristina de Ribas do Sil. En la decoración de las portada de ambos templos, según apuntan los expertos, se puede apreciar cierto paralelismo en la composición, si bien la de Pinol es algo menos antigua y más modesta desde el punto de vista artístico. Antes de que comenzase la restauración de su conjunto de pinturas fue necesario realizar una primera intervención en la cubierta y los muros del templo, a fin de eliminar las filtraciones de humedad que amenazaban la conservación de las pinturas.

Por otra parte, el alcalde de Sober, Luis Fernández Guitián, señala que en el municipio también está pendiente la restauración de las pinturas murales de la iglesia de Lobios. En la situación actual no se sabe cuándo se podrá realizar este proyecto.

Proyectos parados en templos de Monforte y O Incio

La alarma sanitaria ha interrumpido también el proyecto de restauración del interior de la iglesia de San Vicente do Pino, en Monforte, que comenzó a ejecutarse el pasado noviembre y que está a cargo del Ministerio de Cultura. Antes de que comenzasen las obras, el obispado lucense calculaba que podrían durar entre once y doce meses en unas condiciones normales. Por ahora no se puede estimar el atraso que supondrá la detención de los trabajos.

La paralización de las obras detuvo asimismo la restauración de la iglesia Santa Cruz do Incio, que comenzó en otoño y ya se estaba acercando a su final. «Podían faltar unha ou dúas semanas de traballo como moito», señala a este respecto el alcalde Héctor Corujo. El templo es una importante muestra de arquitectura contemporánea.