El fuego alcanza la única laguna glaciar de O Courel

Carlos Cortés
Carlos Cortés MONFORTE / LA VOZ

QUIROGA

Humo en la llanura en la que se forma la laguna de Lucenza, en una fotografía de este miércoles por la tarde
Humo en la llanura en la que se forma la laguna de Lucenza, en una fotografía de este miércoles por la tarde SECHU SENDE

Los servicios de extinción tratan ahora de que no avance hacia el valle de A Seara, en Quiroga

21 jul 2022 . Actualizado a las 01:49 h.

El sexto día de incendios en O Courel terminó con la preocupación centrada sobre todo en los tres frentes que siguen activos en el norte y el este del municipio de Folgoso y en la zona limítrofe del de Quiroga. Uno de esos frentes quemó este miércoles la Campa da Lucenza, el lugar en el que se encuentra la única laguna glacial de estas montañas. Los responsables del dispositivo contraincendios enviaron allí al mediodía tres brigadas de bomberos forestales y dos helicópteros, pero llegaron tarde. A última hora de la tarde, el fuego avanzaba hacia A Seara en una zona cruzada por algunas de las rutas de senderismo más utilizadas de toda la sierra.

La laguna de Lucenza, que en estos momentos está seca, es uno de los elementos de mayor valor del amplio y muy rico patrimonio natural y geológico de la Serra do Courel. Situada a 1.400 metros de altura, se trata de un vestigio de los glaciares que hace miles de años ocupaban estas montañas. Por debajo de la laguna se conservan restos de morrenas, los montones de sedimentos que dejan los glaciares. Los restos de la era glacial son visibles también en el vecino valle de A Seara. Por ese camino avanzaba a primera hora de la noche el mismo frente que había quemado la llanura en la que se forma la laguna cuando termina el estío.

 

El escritor Sechu Sende, que tiene casa en una aldea cercana, forma parte de voluntarios que estos días estuvieron vigilando que la laguna estuviese a salvo del fuego. Este martes subieron de nuevo ocho de ellos a primera hora de la mañana y se encontraron con que en la zona estaban trabajando dos excavadoras que abrían cortafuegos. «Nós avisamos para que mandasen medios, pero o lume estivo entrando durante toda a mañá e os helicópteros non chegaron para botar auga ata as dúas e media da tarde». Durante la tarde fueron enviados al lugar otra brigada de bomberos forestales, además de las dos que llevaban los helicópteros, y una carroceta con agua.

Según lo que pueden ver estos voluntarios, en la Campa da Lucenza y sus alrededores no quedaba ya a última hora de la tarde de este martes mucho más que pudiese arder. El problema era cómo impedir que el fuego avanzase hacia el valle glacial de A Seara.

En cuanto al resto de los frentes activos en la Serra do Courel, el fuego ganaba fuerza en Vilarbacú, otra zona de Quiroga limítrofe con Folgoso. En esa parroquia y en la vecina de Pacios da Serra, sembradas ambas de canteras de pizarra a cielo abierto, el fuego había entrado ya el martes desde el Alto do Boi. También seguía avanzando el frente próximo a Mercurín, cerca de Seoane do Courel, que este miércoles pasó por el castro de A Torre y avanzó hacia Ferreirós de Abaixo, pero sin alcanzarlo.

En cambio, las cosas seguían tranquilas en la mitad sur del municipio de Folgoso do Courel, la que más sufrió los primeros cuatro días de estos incendios. Tampoco parecía ya avanzar como los días anteriores el fuego que empezó en Seceda, el segundo por extensión calcinada.

El fuego de la laguna de Lucenza es una derivación del que empezó en Vilamor, que según la actualización difundida ayer por la Xunta ha quemado ya 10.000 hectáreas. El de Seceda suma 1.110, una cifra que la Xunta no cambia desde hace dos días.