Esta acción ?con la que se busca dar valor a espacios abandonados a través del arte urbano? fue financiada gracias a una ayuda de 5.000 euros del grupo de desarrollo rural Ribeira Sacra-Courel y a una aportación de 2.050 euros del Ayuntamiento de Quiroga. Ahora, tras dejar claro las intenciones de la asociación de «mantener esta iniciativa para el futuro», Núñez señala la importancia de que sean los vecinos los que colaboren: «Queremos que la gente nos apoye y así no depender tanto de las ayudas. Que nos indiquen que tienen un espacio degradado y que paguen las pinturas».
Los diez socios de Quiroga en Marcha están trabajando en conjunto con miras a dos proyectos pendientes de confirmar. Su objetivo, por el momento, es «repetir esta iniciativa el año que viene».