El personal de ayuda en el hogar de Pantón trabajará 37 horas y media a la semana en vez de 40

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

PANTÓN

Las condiciones del personal municipal, en la foto el consistorio, se aplicarán sin excepción
Las condiciones del personal municipal, en la foto el consistorio, se aplicarán sin excepción ROI FERNANDEZ

Una sentencia obliga al Ayuntamiento a aplicarle la misma jornada completa que realiza el resto de la plantilla municipal

17 mar 2023 . Actualizado a las 10:43 h.

El personal del servicio de ayuda a domicilio con contrato a tiempo completo en Pantón trabajará 37,5 horas a la semana en vez de las 40 horas que tenían asignadas hasta ahora por el Ayuntamiento. Una sentencia del Juzgado de lo Social Número 1 de Lugo les reconoce el derecho a disfrutar de las mismas condiciones que el resto de la plantilla municipal en lo relativo a la jornada laboral. El fallo responde al conflicto colectivo interpuesto por la Confederación Intersindical Galega (CIG).

«Malia as nosas peticións e das traballadoras, o goberno municipal negouse en todo momento a recoñecerlle a este colectivo o dereito á ter unha xornada laboral semanal de 37,5 horas, tal e como estabelece dende o ano 2018 a lexislación estatal para o persoal do sector público, incluído o das administracións locais», señalan desde el sindicato.

El argumento municipal para no acceder a esta propuesta era que las trabajadoras tenían marcadas en el contrato las 40 horas de trabajo semanales en jornada completa. La sentencia que dio a conocer este jueves la CIG determina, por el contrario, que en ausencia de un convenio colectivo específico de ámbito municipal debe prevalecer la jerarquía normativa. La legislación de referencia, por ello, debe ser la que aprobó el Gobierno en 2018 y entró en vigor ese año.

El fallo del juzgado de los social concluye que no se puede fijar por contrato una jornada que excede el tope legal. Las trabajadoras estudian formular reclamaciones individuales para que se les compense por las horas de más que acumulan desde 2018.

La CIG sostiene que este conflicto pone de relieve el escaso reconocimiento laboral y social del personal de ayuda en el hogar, que se produce «a pesar de que realizan un traballo esencial» y que se da incluso «cando o servizo se xestiona directamente pola administración, como neste caso».